Por: Álvaro Jordán*
El concepto de estado fallido es una abstracción, cuyo contenido expresa la corriente ideológica que lo interpreta. Según López Martín, A, los creadores del término “Estado Fallido” son lospolitólogos norteamericanos Steven R. Ratner y Gerald B. Helman, consu libro “Saving Failed States”, quienes lo utilizaron para referirsea la condición de estados fracasados como Somalia, Liberia y Camboya.
En esta línea, se ha generalizado su uso para referirse a un estado caracterizado por el debilitamiento de las funciones estatales, especialmente las policiales y judiciales, pero también las de servicio, con la consiguiente parálisis del gobierno. Un estado fallido no garantiza el control físico sobre su territorio, carece del monopolio de la fuerza, tiende hacia el fracaso social, político, económico y está ausente del debate democrático.
Los norteamericanos lo han usado para referirse a estados que cobijan a terroristas y constituyen un peligro para países “estables”, argumentos con los que han justificado invasiones como las de Irak y Afganistán.
Los tres problemas mayores de seguridad internacional del mundo occidental de las primeras décadas del siglo 21 son el terrorismo internacional, la delincuencia y la proliferación de las armas de destrucción masiva, todos estrechamente relacionados con el estado fallido.
Todos los países son socialmente inestables por estar las mayorías sometidas coercitivamente a las minorías. La llamada estabilidad no es otra cosa que un equilibrio inestable, logrado por los efectos del poder, con un desequilibrio relativamente rápido ante los embates de la crisis.
Se hace imprescindible aclarar, que en esta reflexión, en general, se hace uso del concepto de poder como una relación social característica de orden-obediencia, esta es, como una relación de coerción, incluyendo el contenido de Max Weber, del uso legítimo de la violencia en forma de estado, exepto las referencias concretas al poder no coercitivo.
Siguiendo a Clastres P., el poder político lo constituyen el poder coercitivo y el poder no coercitivo. El estadio de la civilización se caracteriza por la presencia sobresaliente del poder coercitivo, es el que distingue a la sociedad occidental, el prerrequisito indispensable para imponer la explotación en la sociedad de clases.
En la sociedad humanista, el estado se transforma en una organización de administración, coordinación, producción y servicio determinada por las bases. El estado weberiano no existe, por lo tanto, el poder coercitivo desaparece, pero el poder no coercitivo adquiere su máxima vitalidad, totalmente separado de la violencia, actuando mediante el control social directo, mejor dicho, ejercido mediante la participación directa de las bases.
Índice de estados fallidos. El estado fallido está considerado como un seri0 desafío a la seguridad interna y externa, motivo por el que se ha creado un índice de estado fallido para medir anualmente la evolución de este pr0blema en el conjunto de los países.
Su análisis adquiere mucha importancia porque la inestabilidad y las consiguientes transformaciones políticas, económicas y sociales pueden expresar proyecciones de conflictos nacionales, que tienden a reproducirse en conglomerados significativos de países, como fue la implosión del sistema socialista, el resurgimiento del socialismo, actualizado como del siglo 21, y, en los tres últimos años, la primavera árabe.
El Fondo para La Paz elabora una lista anual del índice de estados fallidos. Empezó el 2005 con 76 países, el 2009 ya abarcó 177 países y el 2013 son 178 países, en base a 12 criterios resumidos como sigue: 1. La presión demográfica creciente, 2. Movimientos masivos de refugiados y desplazados internos; 3. Descontento grupal y búsqueda de venganza, 4. Huida crónica y constante de población; 5. Desarrollo desigual entre grupos; 6. Crisis económica aguda o grave; 7. Criminalización y deslegitimación del estado; 8. Deterioro progresivo
de los servicios públicos; 9. Violación extendida de los derechos humanos; 10. Aparato de seguridad que supone un estado dentro del estado; 11. Ascenso de elites fraccionalizadas 12. Intervención de
otros estados o factores externos.
Otro punto de vista, arbitrario, es el que presenta Noam Chomsky en su libro “Estados fallidos: El abuso de poder y el ataque a la democracia”. Hace un detallado análisis de lo que significa el poder para la humanidad, interpretando que el abuso de poder lo genera el imperialismo de Estados Unidos de Norteamérica, (EUNA). Adolece de un
grave defecto de contenido sectario, porque el análisis no comprende a los otros centros de poder que existen en la humanidad. Es una opinión demasiado simplificada el inducir en el pensamiento, que la única fuente de abuso de poder es la del imperialismo norteamericano. Es un abuso de poder intelectual y un insulto a la inteligencia.
Si el imperialismo norteamericano desaparece, no habrá cambiado casi nada porque los otros centros de poder, por su propia esencia, continuarán haciendo lo mismo que Chomsky critica a los norteamericanos, por lo tanto, un mínimo de honestidad científica
exige hacer las valoraciones para el conjunto del sistema de poder. Con lo que se llegará a conclusiones muy distintas y más próximas a la realidad.
Evidentemente, al plantear una crítica incompleta del poder, Chomsky deja abierta una puerta para justificar la presencia de otras formas de poder, que tiene mucho cuidado en no tocar, como es la del capitalismo de estado.
Chomsky ha llegado a asegurar que el término Failed States, estados fallidos, es una teoría inventada por la administración estadounidense tras el fracaso de sus políticas acerca del eje del mal, los estados terroristas o estados forajidos y otras creaciones. Lo utilizaría para nuclear a la opinión pública y centrar los esfuerzos contra gobiernos y países cuyas políticas no concuerdan con la visión del gobierno norteamericano.
Es cierto que la preocupación se ha desencadenado allí, pero en realidad, es un fenómeno propio de la etapa actual del desarrollo del capitalismo globalizado, de interés del conjunto de la humanidad, independiente de toda voluntad y preocupa cada vez más por su continuo crecimiento y, más que todo, porque les afecta a todos.
El mal uso político del concepto de estado fallido es el motivo por el que los especialistas de la confusión le dan un contenido indefinido y tendencioso. Así nos encontramos con denominaciones tales como de estados frágiles, estados fracasados, estados desestructurados,
estados en crisis, estados forajidos, estados terroristas, estados en descomposición o estados colapsados y otras expresiones muy diversas con significados muy variados, semejantes e incluso intercambiables.
Toda esta profusión semántica genera incertidumbre y es resultado, precisamente, de la inexistencia jurídica de estas categorías de estados.
Estados fallidos y poder. Por parte del humanismo superior se ha optado por la expresión de “estados fallidos” por interpretar todas sus facetas en función del concepto de poder, que se concentra en el estado, y deducir que esta relación esencial es la que falla cada vez
más, aparte de ser el primero acuñado para hacer referencia a la realidad que se analiza, es además el que goza de mayor asentimiento y difusión.
El humanismo superior interpreta la existencia de la condición de estado fallido cuando éste no cubre sus obligaciones de servicio a la población en un nivel de seguridad y bienestar aceptable, reconocidos
por un marco democrático.
Es una condición presente en todos los estados del planeta debido a que el sistema mundial capitalista está asentado en una estructura de poder al servicio de los “dueños” de la riqueza, o sea los dueños del capital, cualquiera que este sea, privado, mixto o estatal y no al servicio del pueblo.
En todos los países del mundo, el pueblo se encuentra excluido, en distintas proporciones, de la toma de decisiones sobre la distribución de la riqueza, razón por la que la condición fallida es parte inseparable de todos.
La condición fallida expresa la carencia de gobernanza producida por el vacío de poder generado por la supeditación de los intereses del pueblo a los intereses de los dueños de la riqueza, los que, con los dueños del poder, constituyen dos caras de la misma moneda.
El estado se arroga la autoridad de decidir por todos, pero en realidad en el mejor de los casos, con la democracia representativa, decide en función de la mayoría, la que generalmente apenas es mayoría simple, discrimina a los otros, cuyo conjunto hace la mayoría, absoluta y marginada.
Este es el origen del colonialismo interno, que padecen los pueblos y hace cada día más despreciables a los gobiernos que pretenden homogeneizarlos en base a la supremacía que impone la nación estado, arbitrariedad que convulsiona aceleradamente a los pueblos.
A su vez es una de las causas del fracaso del nacionalismo, ya sea en la forma de capital privado, cuya expresión radical fue el nazismo, comúnmente llamado fascismo, sustentado por el partido nazi (Nationalsozialistische Deutche Arbeiterpartai), o ya sea en la forma de capital estatal, cuya expresión radical fue el estalinismo, sustentado por el partido comunista.
De la presente reflexión encontramos que los estados fallidos, en la transicion al humanismo superior, se fortalecen con el agotamiento del sistema de producción capitalista en su fase de globalización, expresa el constante debilitamiento del poder que sostiene al sistema y cuyo final será su inevitable desaparición.
Estados fallidos y civilización. Si se trata, concretamente, de la eliminación del poder coercitivo, se está frente a un proceso mucho más profundo que un simple cambio del modo productivo.
El poder coercitivo es la característica principal del estadio de la civilización, por lo tanto su eliminación significa el fin de este estadio y el advenimiento de uno nuevo, que, ante la desaparición del poder coercitivo y a causa de la insurgencia del poder no coercitivo,
debe ser necesariamente humanista: el estadio del humanismo superior.
Como resultado de la crisis del sistema y por ausencia de orientacion política coherente, la sociedad entra a un periodo de caos caracterizado por la aparición de los estados fallidos. La insatisfacción crece, al margen de la autoridad y a causa de ella, y
se convierten los estados fallidos en la principal característica de la etapa de transición del estadio de la civilización a la del humanismo superior.
Como resumen concluimos, que el agotamiento del sistema de poder, sustento del estadio de la civilización, fortalece el desarrollo de los estados fallidos como embrión informe del estadio del humanismo superior.
Crecimiento de los estados fallidos. En forma general se puede comprender el proceso de formación del estado fallido en el sistema de poder coercitivo a partir del ejército de desocupados, que mantiene permanentemente y en forma artificial el sistema capitalista para asegurar un monto mínimo de los salarios de la masa trabajadora, es decir que el estado fallido es condición necesaria del capitalismo para asegurar sus ganancias con costos mínimos, a su vez, como etapa de transición, es el germen de su desaparición final.
Con la crisis, este ejército crece, desequilibrando la institucionalidad establecida, generando la explosión de la delincuencia, de la corrupción, del crimen organizado, llegando a conformarse verdaderos ejércitos paramilitares a su servicio, cuyas muestras extremas son; En México, de donde, el secretario de defensa de EUNA, León Panetta, afirmó que 150.000 personas han fallecido por la violencia entre los cárteles del narcotráfico y a causa de la existencia de espacios territoriales en los que el estado es muy débil.
Otra forma de ocupación de estos territorios son las guerrillas, como en Colombia, donde el conflicto armado ha dejado más de cinco millones de víctimas, que padece este país desde hace más de medio siglo. Con características propias podemos también incluir a Irak, Afganistán, países de África y del resto del mundo, donde fuerzas irregulares
cuestionana la autoridad del estado.
Un caso sui géneris es el de Bolivia, donde las federaciones de cocaleros de Cochabamba, proveedores informales de coca a los narcoproductores y cuyo producto genera el tráfico internacional de la cocaína, han logrado poner a su presidente de presidente del país, con lo que resulta que los proveedores de coca al narcotráfico han conseguido su propio estado, que les da seguridad interna y gestiona oficialmente la ampliación del mercado a nivel internacional, como por ejemplo: el pedido de autorización del presidente de Bolivia, Evo Morales, a las Naciones Unidas, para la legalización del comercio internacional de la coca.
Con la drogadicción se logra la degradación espiritual y física de la sociedad, su dependencia política y económica, razones más que suficientes por las que el gobierno está muy interesado en ampliar su control mediante el consumo de coca y sus derivados.
El caso extremo del estado fallido, de ausencia de estado desde hace
ya 23 años, es el caso de Somalia, donde no existe responsable gubernamental, por ejemplo, para el cumplimiento de los compromisos internacionales. Internamente se ha consolidado una guerra civil entre los jefes tribales y clanes. Hay una especie de federación fáctica con fronteras en permanente movimiento a causa de la guerra, sin gobierno de coordinación nacional. Incluso las intervenciones internacionales
de la Misión de la Unión Africana en Somalia (Amisom) son rechazadas por la misma población.
Otra muestra, llena de horror, de la proyección del sistema de poder coercitivo como estado fallido es Siria a causa de la guerra civil, la que ha transformado uno de los países más avanzados del cercano oriente en un estado totalmente destruido, con más de cien mil muertos y dos millones de refugiados, con la población carente de alimentos, con el sistema de salud destruido, la producción en bancarrota con la generación actual de la juventud perdida y, lo que es más grave, en la búsqueda de la hegemonía mundial se recurre a los crímenes de lesa humanidad como estrategia de guerra. Es el lugar de enfrentamiento de los intereses geopolíticos de los bloques de control internacional, dentro de los cuales la defensa de los intereses locales están totalmente ahogados.
En la medida que los estados fallidos encuentren solución estable acorde a los intereses de su población se estará ante estados consolidados y ante el nacimiento de la nueva sociedad. Sin embargo, la inestabilidad en la que se mueven, hasta ahora, muestran sólo la insuficiencia de las soluciones ensayadas.
En la mayoría de países existen grandes sectores poblacionales acosados por el hambre, que no tienen acceso a la salud, que mueren por falta de alimentos y medicina, que no tienen acceso a la vivienda, a la educación, no disponen de un salario digno y, en definitiva, no se respetan sus derechos básicos.
La condición fallida se encuentra en todos los países del planeta. En países del capital privado, ricos y poderosos como EUNA, donde existen crónicamente alrededor de 50 millones de pobres, esto es el 16% de la población; en países de capital mixto de hegemonía estatal como China, que ha alcanzado una situación privilegiada en la competitividad de la producción a causa del ejército de reserva laboral de 130 millones de pobres, esto es el 10% de la población que la sostiene; en países que todavía quedan con una economía estatal, fosilizada, como Cuba, con un ingreso que varía entre 10 y 20 dólares/mes; con los parámetros de las Naciones Unidas, de considerar pobre al que recibe menos de un dólar/día y ajustando los ingresos no contabilizados de los subsidios por la carta de racionalización alimentaria, la educación, salud, vivienda y electricidad, la población cubana cae en la categoría de población pobre en aproximadamente un 80%. Esta conclusión es rechazada por el gobierno cubano ya que ellos usan otras valoraciones, todo muy discutible por la ausencia de información estadística transparente.
Todas estas apreciaciones sólo son de tipo económico e insuficiente para una valoración completa. No se consideran aspectos más abstractos como el ambiente de libertad, el derecho a la democracia efectiva, el respeto a los derechos humanos, espacios en los que la mayor parte de la humanidad, por el sometimiento al poder, están muy disminuídos y se los puede calificar de espiritualmente pobres. Al resto, de los dueños del poder, como responsables del sometimiento y la pobreza, se los
puede calificar de espiritualmente miserables.
A medida que la crisis del sistema se agudiza, las dificultades del estado para cubrir sus obligaciones, en general crecen, aunque algunos sectores, minoritarios, logran momentáneamente, no ser arrastrados por la vorágine incontenible de la crisis.
Ante la falta de una explicación coherente, las esplendorosas apariciones de levantamientos populares dejan perpleja a la elite del pensamiento crítico, tanto del sector neoliberal como del neoestatal.
Razón que ha llevado a vigilar más estrechamente el comportamiento del índice de estado fallido a fin de poder apreciar mejor la tendencia del sistema económico, social y político, nacional e internacional.
Estados fallidos y capitalismo estatal. Si bien la condición de estado fallido siempre está presente en el sistema, es evidente, que a partir del colapso del llamado imperio socialista, se manifiesta en forma más aguda.
Fueron 74 años de brutal opresión, los que tuvo que soportar la población soviética de la dictadura del partido comunista y de las dificultades económicas crecientes los orígenes de la incontenible rebelión del pueblo, que desenmascaró para siempre la ignominiosa brutalidad e incompetencia socialista y comunista.
No fueron causas externas, sino internas, particularmente las originadas en la ausencia de libertad, democracia y el acoso permanente a los derechos humanos, las que llevaron a este sufrido pueblo a enfrentar el poder de la segunda potencia económica y militar del mundo y provocar su desmembramiento en 15 estados soberanos. Al mismo tiempo se sublevaron los pueblos de la mayoría de estados satélites del imperialismo soviético, cada uno con sus
particularidades, pero todos enmarcados en una lucha por la liberación de la dependencia soviética y de las dictaduras de sus respectivos partidos comunistas.
No se puede dejar de destacar que la mayoría de estos movimientos masivos se caracterizaron por su esencia pacifica y su profundo contenido humano, a tal punto que, por ejemplo, a la transición incruenta en Checoslovaquia se le dio el nombre de “revolución de terciopelo”, a pesar de haber incluido la división territorial.
Los países dependientes del sistema estatal soviético reasumieron su soberanía en el marco de la economía mixta, conocida como socialdemocracia, por la hegemonía del capital privado sobre el estatal, o como socialestatal por la hegemonía del capital estatal sobre el privado, alternativas atractivas y asequibles a fines de la guerra fría, dentro del sistema universal del capital.
En un sistema agobiado por el abuso estatal, podemos asegurar que marca el inicio de una nueva etapa, caracterizada por el acelerado crecimiento de la condición de los estados fallidos y por la búsqueda de nuevos paradigmas para una sociedad más humana.
Hubo países en los que la dictadura comunista impidió su reemplazo adoptando oportunamente reformas, que de alguna manera dieron una satisfacción parcial a las masas, como lo hicieron China y Viet Nam.
Mantuvieron la verticalidad del partido comunista, asumiendo una nueva política económica de carácter mixto con hegemonía del capital estatal. De esta manera complementaron las ventajas de la explotación del capitalismo privado con las del estatal, se transformaron, temporalmente, en los países con mayor desarrollo económico y dejaron a un lado las aspiraciones a la dignidad y al respeto a los derechos humanos.
Cuba y Corea del Norte, últimos sobrevivientes del llamado socialismo histórico, son los únicos países de economía estatal, que a causa del férreo control político con que el partido comunista todavía oprime al pueblo, han logrado hasta ahora controlarlos mediante la represión, la pobreza económica y espiritual, con que los somete.
La radicalidad del control del poder ha degenerado en la estructuración del estado sometido a dictaduras y al culto de la personalidad, similar a las antiguas monarquías absolutistas, incluyendo la aberrante resurrección de las dinastías en el poder. En Cuba, Raúl Castro es la segunda generación de la dinastía Castro, con 54 años de duración en el poder y en Corea del Norte, Kim Jong-un es la tercera generación de la dinastía Kim, con 65 años de duración.
La transformación de la economía estatal del ex imperio socialista en economía mixta, incluyendo la de sus satélites del resto del mundo, por su carácter pacífico, por la magnitud de su población y por su extensión territorial ha sido la revolución más extraordinaria que se ha dado en la humanidad en todos los tiempos.
El último esfuerzo del imperialismo estatal por salvar el sistema de su estruendoso fracaso fue la invasión de Afganistán y su posterior retirada a consecuencias de su fracaso.
Se debe concluir, dentro de un pensamiento constructivo y responsable, que el sistema estatista de explotación ha fracasado para siempre y cualquier obcecación en este sentido es un defecto de estupidez e inhumanidad, que por supuesto, para un mundo de poder y oportunismo, mientras éste exista y mientras exista la insoportable miseria, será
una alternativa circunstancial del oportunismo político al servicio de intereses mezquinos.
El primer impulso revolucionario presente en el sistema socialista se puede resumir como: 1. Colapso del imperio del capital estatal, la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, (URSS), cuyo desmembramiento originó el nacimiento de 15 estados soberanos con una economía de capital mixto,
- Liberación de los países dependientes del imperialismo socialista, (ej. República Democrática Alemana) adquiriendo una economía mixta, en la forma socialdemocrática.
- Transformación de países de economía estatal (ej. China) en países de economía mixta, en la forma socialestatal, 4. La sobrevivencia de algunos países del capital estatal (ej. Cuba y Corea del Norte), que conservan, excepcionalmente, a través de una dictadura hereditaria, su condición de capitalismo estatal,
- Las transformaciones 1., 2., y 3., representan un importante avance de contenido humano al eliminar dictaduras personales, respaldadas por el partido comunista, y abrazar democracias burguesas en estos países.
Estados fallidos y capitalismo privado. La derrota del sistema mundial del capitalismo estatal, llevó a los ideólogos del sistema mundial del capitalismo privado a proclamar que había llegado el fin de la historia, interpretando que la sociedad había alcanzado por fin un
estado de equilibrio estable. Argucia con la que pretendían anular cualquier vestigio de nuevas propuestas políticas y económicas.
No lograban entender que un nuevo proceso estaba en marcha. La base del sistema capitalista en su totalidad, había comenzado a despedazarse, además que en estos procesos la voluntad no es determinante.
El poder del segundo imperio mundial se había hecho añicos y no hay razón para creer que el proceso haya terminado. En lo político la motivación central fue la lucha contra el imperio soviético, traducido al campo económico fue una lucha contra el imperio del capital estatal.
La primera potencia del mundo (neoliberal) mantiene su condición imperial, pero los problemas causados por la crisis y reconocidos como insolubles, están provocando levantamientos masivos de la población en el planeta, con nuevos reacomodos políticos e ideologicos como los de los países del denominado socialismo del siglo 21 (ss21) en América, esta vez bajo la consigna central de lucha contra el imperialismo norteamericano, más precisamente contra el imperialismo del capital privado.
Las protestas masivas se intensificaron en forma tal, que desbordaron la capacidad de control de las instituciones establecidas y muestran la desesperada búsqueda de alternativas abiertas, de parte de las
mayorías sometidas.
Es la búsqueda de la sociedad poscapitalista: el alzamiento zapatista en México, del 1 de enero de 1994, referencia simbólica del nacimiento del movimiento “antiglobalización”; la campaña contra el Acuerdo de Libre Comercio entre EUNA, Canadá y México, que entró en vigor en 1994; las múltiples rebeliones y movimientos populares, que pasan por el Movimiento de los Sin Tierra (MST) en Brasil, el levantamiento indígena-popular-militar en Ecuador, el “argentinazo” del 20 de diciembre del 2001, las reivindicaciones indígenas y humanistas de Bolivia que provocaron la expulsión del Presidente Sánchez de Lozada, los movimientos revolucionarios que abrazan el ss21, los levantamientos populares que generan la primavera árabe, los indignados de Europa, EUNA, Rusia y China, van alcanzando carácter mundial y auguran la revolución más profunda de todas las realizadas hasta la fecha: la del humanismo superior.
La civilización, que tardó miles de años en concentrar el poder, hasta alcanzar su globalización, pierde solidez rápidamente, originando por el momento, una fase generalizada de transición, de estados fallidos, y buscando su salida multifacética y al margen del poder, por lo tanto, necesariamente humanista.
No hay que olvidar, que el poder coercitivo animaliza al ser humano, por lo tanto degrada los valores y principios que rigen su comportamiento y violenta el derecho natural del ser, por lo que se puede calificar de anti humanista. El poder no coercitivo, por el contrario, humaniza al ser, es el origen de la permanente rebeldía de las bases por una sociedad mejor, es la expresión auténtica de la recuperación del derecho natural y de las bases, expresa su diversidad, por lo que se debe reconocer su esencia humanista.
La derrota de EUNA en Viet-Nam empezó a mostrar las debilidades del imperialismo norteamericano, la potencia mundial número uno, que fueron contrarrestadas con un nuevo orden económico, introducido como el neoliberalismo de la década de los 80.
Fue una nueva política para apoderarse de las riquezas de las empresas públicas y estatales mediante su privatización, la desregularización y la liberación comercial.
La momentánea desaparición del sistema socialista y la necesidad de preservar el control del poder en un mundo unipolar dio pie al neoliberalismo para reforzar el nivel de la guerra, de baja intensidad al de guerra directa. Aparte de los ajustes territoriales pendientes de la guerra del 45.
De esta manera se buscaba consolidar el nuevo orden mundial en el que se presenta en forma desembozada la autoridad del poder imperial como sustento de la civilización.
La invasión a Panamá, el 20 de diciembre de 1989, con el secuestro y encarcelamiento de su presidente, marca el reinicio de esta nueva forma de usar el poder en la guerra, Las demostraciones de poder, que llevaron a las invasiones de Granada, Iraq, Kosovo, Afganistán y Libia es el nuevo estilo para dirigir las relaciones internacionales, después de terminada la guerra fría. Quedaron para la formalidad de los ingenuos el respeto a los acuerdos internacionales y a los derechos humanos, así es que a los sospechosos de terrorismo se los apresa, veja, tortura y asesina sin ninguna figura de juicio.
El ejemplo más vergonzoso para la humanidad de estos hechos son las decenas de prisioneros que todavía quedan en Guantánamo, a quienes ante su protesta de huelga de hambre se los alimenta en forma artificial y forzada.
La ignominiosa demostración pública del sometimiento de Europa a los intereses de EUNA con el reciente bloqueo de cuatro países de Europa: Francia, España, Italia y Portugal, al vuelo internacional del Presidente de Bolivia, en el que se sospechaba la presencia de un ex agente de la CIA, autor de la publicación de documentos secretos de la injerencia norteamericana en todos los países del planeta, son apenas muestras, la punta del iceberg, de lo que representa el poder
neoliberal en el mundo.
América había sido poblada por distintas migraciones que llegaron en diferentes momentos de su prehistoria y había desarrollado un mosaico de culturas con lenguajes propios totalmente independientes de las del resto del orbe. La mayor parte de su superficie estaba poblada con culturas que se encontraban en el umbral de la civilización, otras habían logrado traspasarlo sin alcanzar el desarrollo tecnológico que poseían los europeos. Esta situación fue aprovechada para transformar el continente en territorios de colonias europeas.
Después de cruentas guerras, las colonias inglesas de Norteamérica lograron su emancipación. Posteriormente, en las colonias españolas, después de 15 años de guerras, una alianza de ingleses, criollos a la cabeza de Bolívar, San Martín y O`Higgins y monarquistas españoles, aislaron a los patriotas, mestizos y nativos y se transformaron en repúblicas económicamente dependientes de los ingleses, dependencia que finalmente pasó a manos de EUNA.
Las pretensiones imperiales del Libertador de América, Bolívar, registra la historia, como una hazaña de liberación contra el tutelaje español y un fracaso imperial al no realizarse sus ambiciones por conformar otro imperio americano, en todo caso se prestó para consolidar una nueva dependencia económica neocolonial.
Éste es el largo periodo de opresión, de 500 años, del que buscan liberarse los distintos estados del continente. Esta situación es oportunamente aprovechada por los abanderados del ss21. Otra propuesta de poder para seguir explotando al pueblo, a falta de una propuesta seria, que lleve a estos pueblos a su liberación.
La coyuntura histórica ha encontrado a los pueblos americanos sin un proyecto que resuma y proyecte sus intereses. A falta de nada, en la búsqueda desesperada de alguna solución a la miseria, y la criminalidad, algunos se han decidido por una peligrosa aventura oportunista con el ss21.
La revolución del pueblo venezolano, es la respuesta de la dignidad del pueblo a las imposiciones imperiales de EUNA. Fue denominada como bolivariana por su presidente Hugo Chávez en el afán de justificar el nacimiento de un nuevo y poderoso estado continental inspirado en la continuidad del pensamiento de Bolívar y actualizado c0n la ideología del socialismo.
Ante el fracaso del imperio soviético, el pensamiento izquierdista de las Escuelas de Bremen y Glasgow dio inicio a las ideas del ss21, desarrolladas por Heinz Dieterich Steffan, (HD), las que abrazó Hugo Chávez el 2005, como respaldo teórico de su proyecto político continental, tratando de armonizar, forzadamente, las pretensiones imperiales de Bolívar con las del socialismo como modelos del proyecto de la Revolución Bolivariana, ambos fracasados.
Asimismo, el triunfo del movimiento indígena y campesino de Bolivia, de contenido humanista y democrático, rápidamente degeneró en un gobierno populista de capital mixto, inspirado por el modelo chino.
Con la adopción del ss21, ha devenido en un modelo autoritario de hegemonía estatal y racista, cuyo objetivo es el control del poder total mediante la eliminación selectiva de la oposición externa e interna.
Las aspiraciones imperiales se expresan en su empeño por resucitar el imperio del Tawantinsuyo y adoptar hegemónicamente la cultura aimara, en un país con 34 etnias. Otros países del continente, que muestran su adhesión al ss21, con distintos grados de reticencias son Ecuador, Nicaragua, Argentina y Brasil.
Siguiendo la tradición de los viejos estados socialistas del siglo 20, existe una clara tendencia en estas organizaciones por transformar las democracias burguesas en dictaduras burocráticas, mediante presidencias vitalicias logradas a través de elecciones forzadas desde el poder. Formas de lo mismo, es la sucesión presidencial por el dedazo del presidente, en condición terminal, como sucedió con la designación de Nicolás Maduro en Venezuela por el expresidente Hugo hávez. Siguiendo el ejemplo de Cuba y Corea también se reproduce la herencia presidencial, con mediación eleccionaria, forzada por el poder, de un familiar próximo como fue la sucesión del fallecido presidente Néstor Kirchner en Argentina por su viuda, doña Cristina Fernández de Kirchner.
Para resumir las disquisiciones teóricas simplemente mencionemos las conclusiones de HD, autor del ss21, en relación a lo que está sucediendo en los países sudamericanos, que dicen abrazar este socialismo: “Es correcto apoyar a Evo, Chávez, Correa et al como alternativa socialdemócrata al neoliberalismo. Pero, ninguno de ellos ha creado estructura institucional alguna, que trasciende a la economía de mercado o al parlmentarismo burgués, ni lo va a hacer”.
Por otro lado, HD en el artículo: “Partido Comunista de China se abre al Socialismo del Siglo 21”, sostiene, que “los pueblos con la ciencia y los Estados progresistas construyen el socialismo del siglo 21”,
como la “única alternativa disponible” para la sociedad poscapitalista global.
Con las primeras afirmaciones queda demostrado el fracaso del ss21 y de todos los gobiernos que proclamaron y siguen proclamando su adopción como marco teórico de sus políticas de gobierno. Ninguno lo está aplicando, es decir, que lo pregonan sólo como discurso propagandístico de manipulación de las masas de una supuesta actividad en beneficio de las mayorías nacionales, lo que resulta ser nada más que otro grotesco teatro de despreciable calidad humana. Se entregan dádivas a cambio de la libertad, los derechos humanos y la dignidad.
Estas afirmaciones, confirman que el planteamiento teórico del ss21 ha demostrado la inviabilidad de su aplicación y ha comprobado una vez más el fracaso de cualquier intento de resucitar la teoría del socialismo. En todo caso, los periodos prolongados del control del estado, (14 años en Venezuela, 8 años en Bolivia, En Siria 12 años de Assad más 30 años de su padre) a causa de los abusos del poder, para la élite dictatorial es una victoria, a la que importa poco la degradación de los derechos humanos de los pueblos, que fuera muy deseable evitar.
El gobierno de China está saliendo rápidamente del capitalismo estatal al capitalismo socialestatal, una variante más del sistema capitalista globalizado, y no existe ningún vestigio que lleve a pensar que quiera volver al estatismo.
La cúpula del partido comunista chino se desborda cada día con miles de nuevos millonarios y multimillonarios capitalistas, conformando la nueva clase de burócratas, corruptos y enriquecidos por el estado.
La publicación del artículo de HD es sólo una insignificante muestra de apertura hacia la libertad de prensa en China, que por lo demás hasta ahora, es sólo un sueño utópico, útil para la manipulación de las masas, desesperadas por mejorar sus derechos humanos.
Ante el endurecimiento del poder imperial norteamericano, algunos pueblos de América se dejaron arrastrar por los cantos de sirena del ss21. Lamentablemente adolece de defectos teóricos fundamentales como es el de constituirse apenas en un remiendo del socialismo real del siglo pasado. Se asienta en principios que llevaron al fracaso el socialismo del siglo 20”, a causa de la ausencia de libertad, democracia y por el acoso permanente a los derechos humanos, con lo que se garantiza la inviabilidad del planteamiento del ss21: 1. Plantea el igualitarismo en contradicción con la principal característica de la definición de la materia: de estar en permanente movimiento y cambio, lo que exige las diferencias de unos y otros e incluso de uno mismo, con el tiempo. El rechazo a la robotización del ser humano es la fuerza social más poderosa, dispuesta a sacrificar la existencia en la lucha por el reconocimiento de los derechos individuales, concretamente el derecho a la diferencia y a la identidad. - Es de contenido antihumanista por estar asentado en las imposiciones del poder, de esencia conservadora, en abierta contradicción con las necesidades humanistas de la sociedad, motor de los cambios en la historia a lo largo de la civilización.
- El ss21 propone como parte sustancial de su proyecto, la democracia participativa, la que utiliza únicamente como estrategia de poder.
Logrado éste, intenta mantener su fachada, imponindo una democracia contradictoriamente sustentada por el poder y con la imposición del partido único, para lo cual, el objetivo principal es la eliminación de toda oposición política, incluyendo la interna, para el endiosamiento del jefe.
Siguiendo el modelo estalinista, impone, una dictadura y de culto a la persona. Comportamiento cínico y de contenido moral despreciable. La democracia participativa, forma democrática de aparente ampliación de la democracia representativa, es otro engaño porque en un régimen de poder la democracia participativa, como la representativa, sólo
existirán, limitadas por/y en función a la voluntad del poder.
Para que la democracia represente una ampliación efectiva de la
voluntad de los pueblos, debe ser tomada por el pueblo mismo, debe ser
una expresión del empoderamiento de las bases, fuera de la autoridad
vertical del poder.
A esta democracia el humanismo superior le llama democracia de bases,
es el poder no autoritario que emerge desde la base misma y sobre ella
se construye la estructura administrativa, de coordinación, producción
y servicios que satisfaga sus intereses.
La estrategia de control del poder del ss21 es de contenido
nazi-fascista, ya que se apoya en el uso del modelo de Hitler y
Mussolini. Recurre a la democracia para la toma del poder y, con éste,
lo conserva como dictadura y culto a la persona, atropellando la
democracia.
Este modelo es cada vez más recurrente en el mundo para el ascenso al
poder y su aspiración de control permanente. Muestra la presencia de
un proceso de fascistización del sistema mundial de poder.
Mientras la condición de país fallido crece, es decir que la debilidad
del poder aumenta, paradójicamente la sociedad nacional e
internacional, en un esfuerzo desesperado por su existencia, plantean
una embestida del poder cada vez más agresiva de parte del estado
verticalista y el sistema imperial agonizante, amenazando cada vez más
a la sociedad con imposiciones de contenido fascista.
Una muestra posmoderna de esta tendencia es el espionaje a nivel
mundial recientemente denunciado, el ejercido por EUNA mediante la
Internet. Espionaje quer esta siendo usados por todos los centros de
poder, ya es público su uso en EUNA, Rusia, China, Cuba Iran y otros.
Es la reacción de las minorías por la preservación de los beneficios
que acumulan, ante el miedo de perderlas y a causa de la creciente
conciencia de las mayorías.
Las características del estado fallido, en condiciones avanzadas de
descomposición son: 1. Proceso creciente de vaciamiento sectorial del
poder. 2. Corrupción descontrolada. 3. Incremento de las obligaciones
públicas insatisfechas 5. Saturación de la criminalidad. 6
Desconocimiento de los partidos políticos como representación de la
sociedad. 7. Desprestigio de la Policía. 8. Órganos de justicia sin
credibilidad. 9. Instituciones del estado y el estado mismo
desvalorizado. 10. Fascistización del estado. 11. Estado de convulsión
creciente. 12. Rechazo del centralismo 13. Aislamiento internacional. - Aparición de procesos de desintegración. 15. Pérdida del control
físico del territorio. 16. Caos.
El concepto de estado fallido, para algunos autores, ha estado muy
estrechamente relacionado con la preocupación norteamericana por el
terrorismo, argumentando que el estado fallido es fuente de generación
del terrorismo, que afecta a los estados más estables.
Es cierto, que los terroristas establecen su santuario en los países
débiles de poder, y desde allí, selectivamente, concentran sus ataques
en función a sus intereses políticos como sucede con los talibanes de
Afganistán. Sin embargo esta afirmación generalmente no se cumple, ya
que a las características del estado fallido acompaña una maduración
creciente de la conciencia del pueblo, que se expresa en las
multitudinarias manifestaciones pacíficas que brotan por todo el
mundo.
No se puede evitar la aparición de grupos reducidos, inmaduros y
desesperados, que constituyen el medio de cultivo del terrorismo y
muchas de sus acciones se incuban en el mismo estado afectado, ya sea
éste estable o no. Son formas positivas y negativas de las luchas
asimétricas.
El estado fallido expresa un estado de debilitamiento del sistema de
poder que encadena el mundo, es una expresión de la crisis del
sistema, de la imposibilidad de resolver los problemas que van
apareciendo en el sistema capitalista globalizado, muestra el
desarrollo del grado de agotamiento del sistema y la falta de claridad
política en la proyección del futuro de la humanidad.
Al mismo tiempo es la forma anárquica de protestar del pueblo, que
ante la falta de condiciones subjetivas, por insuficiente conciencia y
organización, actúa sin darle dirección a sus protestas, de lo que se
aprovechan los viejos y experimentados partidos políticos.
Sabe lo que no quiere, como lo expresan los discursos de
antiglobalización, antimodernistas, anticapitalistas, antisistémicos y
otros, que expresan las opiniones del pensamiento crítico
internacional, pero todavía no ha madurado suficientemente una
conciencia para sí, del pueblo, para trazar un proyecto, que englobe
la diversidad de intereses involucrados en las protestas, sin embargo
es evidente que el nivel de conciencia crece en la medida que se
ensayan nuevas alternativas y el sistema capitalista se agota.
A pesar de declararse los movimientos de bases como antipartidos,
todavía logran ser seducidos por partidos populistas, aprovechándose
del efecto de los levantamientos populares. Es lo que ha sucedido en
América. La bandera de las luchas antimperialistas fueron levantadas
por los defensores del ss21, argumento con el que lograron el poder,
pero ya con él se siguen manejando en el marco del capitalismo, con
mayor preferencia en el del capitalismo estatal. Algo similar está
sucediendo con los movimientos rebeldes de la primavera árabe.
En definitiva el estado fallido no es otra cosa que el campo de
confrontación a veces pacífica, a veces violenta, de una lucha
política, económica y social asimétrica entre la conciencia de un
pueblo, que pugna por alcanzar una vida digna, y minorías armadas con
los más sofisticadas tecnologías protegiendo las riquezas acumuladas
en siglos de explotación de la masa popular.
Es una lucha por el poder político en el campo del poder coercitivo,
en el cual el poder imperial tiene la supremacía, que sólo logrará ser
superado cuando la correlación de fuerzas favorezca al poder no
coercitivo, mientras tanto éste se extiende y profundiza por todos los
países del sistema.
La ola de las rebeliones populares está alimentada por las luchas
contra el imperialismo del capital del estado, las luchas contra el
imperialismo del capital privado, y las luchas contra los instrumentos
de estos monstruos de abuso del poder, estos son el estado, el
ejército, los partidos políticos, la prensa, las instituciones,
organizaciones sociales y religiosas que los sirven como instrumentos
de explotación y origen de la miseria, de la desocupación, de la
ignorancia, de la criminalidad, del enriquecimiento ilícito y todas
las aberraciones humana causadas por el poder al servicio de la
preservación de la riqueza para las minorías.
La sociedad del poder se ha transformado en un freno a las ansias por
conseguir mejores condiciones de vida para la humanidad, en toda su
diversidad.
El poder busca la homogenización. En la lucha del pueblo se conjugan
los distintos intereses que conforman la diversidad de conjuntos de
la sociedad, que pugnan por romper las trabas con que los oprime el
poder.
Esta es la riqueza de las luchas que se vienen presentando en América,
África, el mundo árabe, Europa y el resto del mundo, en forma de un
terremoto planetario que estremece los cimientos de los centros de
poder de EUNA, UE, Japón, Rusia, China, Irán, Brasil y otros centros
menores en busca de una sociedad diversa.
Estados fallidos y la primavera árabe. En el mundo árabe se han
enquistados por mucho tiempo dictaduras corruptas en la forma de
reyezuelos, dictaduras militares, civiles y teocráticas sometidas a
potencias europeas, norteamericanas, asiáticas, privadas, estatales y
teocráticas. Verdaderas satrapías, causantes de la miseria de estos
pueblos y fondo de una permanente situación convulsiva.
El desencadenamiento de la crisis terminal del capitalismo, la
introducción del intercambio del conocimiento mediante la
digitalización y la comunicación en tiempo cero y en forma directa,
posibilitó la conjunción de voluntades reivindicativas de los derechos
conculcados por las tiranías árabes y dio nacimiento a la rebelión de
alcance internacional llamada “primavera árabe”.
Se inició como protesta por el suicidio, de un vendedor ambulante en
Sidi Bouzid mediante la autoinmolación ígnea, en Túnez. Éste fue el
desencadenante de las insatisfacciones contenidas por gobiernos
sátrapas, de viejas dictaduras como la de Zine El Abidine Ben Ali en
Túnez, con 24 años en el poder; la de Hosni Mubarak con 30 años en el
poder, en Egipto.
Ante el arrollador embate del movimiento reivindicativo y ante la
amenaza de perder el control económico y político de esta región, bajo
la presión de los centros de poder imperial se han iniciado reformas
democráticas, con nuevos gobiernos o con los antiguos, pero
manteniendo la dependencia económica.
Este proceso con algunas variantes locales, se repite en todo el
Magreb, el Medio Oriente y la periferia del mundo arábigo
afro-asiático. Si bien, las causas de la rebelión son similares, los
procesos son diferentes.
En las crónicas revueltas de Yemen, que ya se expresan como una guerra
civil interminable, donde se entrecruzan intereses económicos con
fanatismos religiosos, finalmente, se acordó una transición pacífica
con intervención de las Naciones Unidas (NU). El dictador Alí Abdulá
Saléh entregó el poder, después de 34 años de tiranía, pero la
rebelión contra el centralismo continúa.
También se produjo el levantamiento del pueblo libio, hastiado de una
dictadura de 42 años de duración, de la corrupción de la familia de
Muammar Gaddafi y su entorno gubernamental, que habían sumido al pueblo en condiciones humillantes por la ausencia de libertad y del ejercicio de los derechos humanos fundamentales. Ante las presiones pacíficas, el dictador reaccionó con violencia, lo que provocó reacciones más radicales del pueblo, dando inicios a una guerra civil.
En este ambiente intervinieron intereses internacionales de Europa, en particular, y luego de EUNA. Provisionalmente se ha dado una solución de apertura democrática, pero que mantiene la dependencia económica.
Se estima en algo más de 50.000 los muertos durante la guerra
La sublevación siria es más compleja porque se trata de un país que no responde a la línea política del capital privado y ante la rebelión del pueblo, al igual que en Libia, la dictadura de Bashar Al-Asad, quien gobierna ya hace 12 años, después de heredar la dictadura de su padre de 30 años, ha respondido con violencia provocando otra guerra civil. El gobierno ha buscado y ha conseguido el respaldo militar exterior del conjunto de países del capitalismo socialestatal, mientras que la oposición es apoyada por el conjunto de países del capital privado, socialdemócrata e islamistas, incluído Al Qaeda.
Panorama que amenaza con transformarse en una guerra internacional. La guerra civil en Siria, en dos años y medio, ha causado más de 100.000 muertos y más de 2.000.000 de refugiados.
Las reivindicaciones con las que se sublevaron los pueblos contra las satrapías árabes, llevaban incluida las aspiraciones de liberación de la dependencia neocolonial de los centros de poder internacional. Los cambios alcanzados no lograron a esta segunda reivindicación por lo que el estado de rebeldía persiste. Así por ejemplo el nuevo
presidente de Egipto, Mohamed Mursi, inició una política represiva y
sectaria, en beneficio del fanatismo islámico, motivo por el que
después de algo más de dos años el descontento resurgió y el
movimiento popular ha exigido respeto a las consignas de
democratización, obligando al nuevo cambio de gobierno.
Un descontento similar se presenta con Túnez. Es decir que los cambios
habidos son insuficientes para las aspiraciones populares, a causa de
haberse encaramado partidos oportunistas en la cresta de la revuelta y
a la falta de políticas armónicas con las necesidades de la
ciudadanía. Se desvirtuaron los objetivos de la revolución y se ha
desencadenado el inicio de otra ola de exigencias que auguran mayores
cambios, no solo en estos países, sino en el resto del mundo árabe.
En Siria, ante las amenazas de una confrontación internacional se ha
producido un reacomodo de los sectores enfrentados, acercando las dos
variantes del capitalismo mixto para enfrentar a los rebeldes
populares e islamistas
Como resumen de esta tercera ola de las aspiraciones humanistas de los
pueblos se puede concluir que: - Se están transformando las dictaduras en democracias burguesas. Si
bien no satisface las aspiraciones de los pueblos, traslada las luchas
a un nivel menos violento. - La fuerza moral y numérica de las reivindicaciones populares obliga
a las distintas expresiones de poder a formar un frente común contra
los pueblos, desnudando de su esencia inhumana, cuyo único afán es la
preservación del poder para seguir explotándolo. Así por ejemplo, en
general, al inicio de las manifestaciones se producen alianzas
espurias entre el capital privado y los terroristas de Al Qaeda.
Particularmente notoria es esta alianza en la guerra civil en Siria y
en la primera etapa de la guerra civil en Libia. No hay que olvidar
que ya en la guerra de liberación de Afganistán contra el imperialismo
soviético, EUNA entrenó y apoyó con armas a Al Qaeda. En el decurso de
la guerra en Libia se impuso el sector burgués y se desplazó el de Al
Qaeda. Arabia Saudita y Qatar, aliados incondicionales de EUNA apoyan
a integristas islámicos de distintas naciones islámicas, mientras EUNA
y Europa apoya las democracias burguesas islámicas, en lucha común
contra las satrapías árabes. - La guerra civil en Siria ha traspasado los límites aceptados por
los acuerdos internacionales, ha entrado al campo del crimen de lesa
humanidad como instrumento de guerra. Sin embargo el estado de crisis
de los centros internacionales de poder está frenando la
internacionalización de la guerra por los riesgos suicidas implícitos.
Las manifestaciones de diálogo y la disposición a la búsqueda de
soluciones políticas están mostrando un punto de quiebre de las
imposiciones de fuerza a nivel cupular. Se está produciendo un
reacomodo de las fuerzas de poder internacional, neoliberal,
neoestatal e islamistas, para frenar las rebeldias populares de la
primavera árabe. - La incipiente conciencia humanista no logra todavía estructurar la
defensa, para sí, de los intereses del pueblo. Es decir que falta
conciencia y falta organización, pero es evidente que el proceso ha
dado pasos importantes al decantar la lucha entre los distintos
centros de poder imperial, por un lado, y el frente popular rebelde,
por el otro. El pueblo continuará luchando hasta encontrar la solución
humanista que busca.
Por el momento, se trata de un teatro de disputas por el poder, entre
el sector económico neoliberal, el neoestatal y el islamista donde el
perjudicado es el pueblo. Los cientos de miles de muertos y los
millones de refugiados, para no detallar las miserias sufridas por los
sobrevivientes, es resultado de una política criminal dirigida a
consolidar el control del poder.
Es evidente que de continuar la humanidad por este tenebroso
recorrido, está destinada a tener un final apocalíptico, como ya lo
anunció el Informe Lugano de Susan George, que sugiere que se habría
empezado a eliminar la población sobrante, hasta alcanzar el nivel
sostenible del sistema de 4.000 millones de habitantes.
El humanismo superior es la única alternativa, hasta ahora, propuesta
para salvar al género humano y su hermana la naturaleza de esta
hecatombe planetaria.
Estados fallidos y países desarrollados. El cuarto grupo de estados
fallidos es el conformado por los países más desarrollados, económica,
tecnológica y científicamente. Estos son EUNA, UE, Rusia, China,
Japón, Canadá, Australia, India, Brasil y otros menores. Nótese la
conformación del grupo, con países de hegemonía del capital privado
como EUNA y UE y países con hegemonía del capital estatal como Rusia y
China.
Sus oligarquías han acumulado las riquezas del mundo, sin embargo
ninguno se libra de la condición fallida. Apenas el 2% de ricos poseen
el 50% de las riquezas del mundo, el resto, el 98% sobrevive con el
otro 50%.
Este grupo tiene la particularidad de constituir parte sobresaliente
del universo de los estados fallidos del sistema, al mismo tiempo de
conformar el núcleo generador de la crisis mundial.
Como estados fallidos, en su interior existe una parte importante de
pobres con sus secuelas, así por ejemplo EUNA tiene 50 millones de
pobres (16%). Su masa laboral desocupada, de reserva, que normalmente
oscilaba alrededor del 5 %, con la crisis se elevó al 9%. Los
problemas de la migración son permanentes y de tal magnitud que, por
ej., ha quedado pequeño el muro que construyó la República Democrática
Alemana alrededor de Berlín y el que construye Israel para aislar
Palestina, ya que la muralla de la vergüenza norteamericana cubrirá
1.200 km de la frontera con México. La ingente deuda financiera ha
obligado a cerrar el gobierno federal durante 16 días con las
consecuentes complicaciones en la actividad económica y la
desocupación del país. La discriminación racial de afroamericanos y
sudamericanos es generalizada, particularmente es vergonzoso el
comportamiento racista de la policía. Los grandes consumidores de
drogas y las mafias más importantes del narcotráfico se anidan en este
país. La cultura de la violencia está internalizada en la cultura
norteamericana a todo nivel y espacio, a través de la televisión, el
cine, la tradición, el comportamiento prepotente de la policía, la
venta y el uso público de armas y, sobre todo, por el papel que se
arroga de gendarme internacional. La degradación humana masiva es el
problema más grave que generan los EUNA ya que desde allí trasciende
la crisis, generalizada al conjunto de país y al resto del sistema.
Como dueños del poder central de la sociedad, se arroga el derecho de
transferir abusivamente los costos de la crisis al sector campesino,
laboral y clases medias a fin de sostener el sistema de explotación en
beneficio de los dueños del capital. En forma similar, a nivel
internacional, los ajustes económicos y financieros que se imponen en
Grecia, Chipre, España, Portugal y resto del sistema, comprende
transferencias económicas en beneficio de los centros del poder
imperial, a pesar de ser estos la fuente de la crisis.
Este cuadro provoca en el mundo entero todos los males que lo aquejan:
guerras civiles e internacionales, genocidios, hambrunas,
desequilibrio ecológico, contaminación ambiental, corrupción, crimen
organizado, pérdida de valores, degradación moral y una lista
interminable de calamidades imposible de totalizar aquí.
La condición fallida de los otros países del grupo es más o menos
similar. Así por ejemplo en la UE la pobreza abarca un 16% de la
población. En Rusia, abarca al 13% de la población. En China es del
10%. En Japón es del 20%. En India es de 22%, etc., a fin de no ser
repetitivos diremos simplemente que los otros aspectos de la condición
fallida mencionados para los EUNA, en forma similar, con algunas
variantes particulares, están presentes en ellos.
En EUNA fue dónde se desencadenó la crisis mundial. Se inició como una
crisis financiera provocada por lo que se llamó la burbuja
inmobiliaria. Esta crisis financiera, acompañada de los incrementos de
precios de la energía, los alimentos y materias primas rompió el
equilibrio del sistema capitalista, ya de por sí explosivo a causa de
la globalización de la economía, desnudando un conjunto de procesos
diabólicos, identificados como crisis energética, crisis alimentaria,
crisis poblacional, crisis ambiental, crisis económica y financiera,
cuya irresolución se engloba en la denominada crisis de las
macropolíticas, conjunto dantesco, reconocido como crisis mundial.
La producción de los recursos naturales alcanzó las fronteras de la
capacidad planetaria de abastecimiento, originando el incremento
descontrolado de sus precios y en consecuencia un incremento en los
costos de los bienes de consumo.
A fin de mantener los precios competitivos y para mantener el consumo
se incrementó la productividad del sector laboral ya sea eliminando
trabajadores, disminuyendo salarios, aumentando las horas de trabajo,
introduciendo nuevas tecnologías y otros. Se ajustaron los aportes de
la población en forma de impuestos, disminución de servicios,
achicamiento del estado y otros.
En resumen se declaró la condición de crisis para justificar mayores
abusos contra la población y mostrar las nuevas exigencias, así como
la restricción de servicios e incrementos de impuestos como condición
indispensable para lograr la recuperación, que no es otra cosa que
lograr un nuevo nivel de explotación, buscando recuperar el equilibrio
y preservar la gobernabilidad.
En conjunto, estos son los sectores que padecen, soportan la crisis y,
con seguridad se puede decir, que gracias a ellos en otras
oportunidades se ha podido lograr la recuperación de la economía
capitalista.
A pesar de todas las medidas, en EUNA, en forma similar a los ajustes
en la UE, crece el número de municipios que se declaran en quiebra
por no poder pagar sus deudas. Detroit, capital del estado de
Michigan, es el caso emblemático de este fenómeno. Esta ciudad, otrora
centro mundial de la industria automovilística, se ha declarado en
bancarrota. El 70% de la población ha abandonado la ciudad, hay 78.000
edificios del centro, abandonados. La tasa de homicidios es de las más
altas del país. El desempleo es el doble del resto del país. Según
declaraciones del Alcalde de Detroit, publicadas en el “Dosier 33”,
el 23 de julio de 2013, “Más de 100 ciudades de Estados Unidos tienen
los mismos problemas que tenemos”, dice él.
En todo caso, el tercer componente de la economía, los dueños del
capital, son los que determinan la existencia del sistema, sin ellos
no existiría el capitalismo. Son los que poseen el poder y lo usan
para salvar y sostener su sistema. El sistema capitalista no es de los
trabajadores, empleados y pueblo en general, ellos son los explotados
para el beneficio del capitalista, son los esclavos de la
globalización.
Los capitalistas son los que aseguran siempre sus ganancias ya sea
porque los más poderosos pueden continuar haciendo buenos negocios y
los débiles, que entran en quiebra, son recuperados con dineros
públicos.
Los montos entregados para el rescate de bancos y empresas privadas
en quiebra alcanza cifran inimaginables. Con el rescate la deuda
privada se convierte en pública y ésta, la paga los dineros del
pueblo. Dicho en otras palabras, el pueblo es el que aporta los
recursos para cubrir las aparentes pérdidas de los dueños del
capital. Luego con el rescate las pérdidas se transforman en ganancias
y el pueblo se queda con la deuda.
En los desajustes que resultan de la crisis está el origen del
incremento de los estados fallidos. La imposibilidad de seguir
cubriendo las obligaciones de servicios del estado, crea los vacíos de
poder. La explotación extrema resquebraja la institucionalidad de
estos países, desequilibrando el poder que los sostiene y
transformándolos en estados en los que se ha iniciado un proceso de
achicamiento sostenido del poder vertical. Es la lenta agonía de la
sociedad que muere, es la etapa que antecede al nacimiento del nuevo
estadio: el estadio del humanismo superior.
La crisis mundial estuvo precedida por brotes aislados que se dieron
en Argentina, Brasil, Méjico y en Asia. Posteriormente, la burbuja
inmobiliaria, la crisis financiera y el cierre obligado de grandes
bancos e instituciones empresariales en EUNA, extendió la crisis, con
distintas características, al resto del mundo.
En Europa todos los países entraron en recesión con valores negativos
de la economía. El producto interno bruto anual de la Eurozona cayó el
2008 al 0,4%, el 2009 cayó al -4,4%, el 2012 fue de -0,6%. La
situación del desempleo pasó a más del 12,2% en 2013.
La recesión en la eurozona ha tenido un pequeño repunte. Ha alcanzado
un PIB de 0,3%, el segundo trimestre del año 2013, por lo que se
apresuran los manipuladores del pensamiento a declarar que el fin de
la crisis ha comenzado, la verdad es que en el 2010 y 2011 han tenido
repuntes mayores y la crisis continua.
Los países más afectados por la crisis, al borde del caos, son España,
Grecia, Portugal, Italia Chipre, Islandia e Irlanda.
En España, con la derrota del gobierno socialdemócrata (1996) se
comenzó a sentir la insatisfacción de la población al apoyar la
renovación con un gobierno conservador, dirigido por el Partido
Popular, a la cabeza de José María Aznar (1996-2004). Ante su fracaso,
éste a su vez fue sustituido por otro socialdemócrata dirigido por
José Luís Zapatero (2004-2011), que se vio obligado a adelantar las
elecciones y fue de nuevo reemplazado por otro gobierno conservador,
de Mariano Rajoy (2011-2013), al que ya se le está exigiendo la
dimisión.
En Grecia sucede algo similar con los partidos. En relación con el
Producto Interno bruto (PIB), con la crisis, a partir de un valor de
4,5% en el 2006, éste ha disminuido sistemáticamente hasta alcanzar un
valor de -7% en el 2012, se pronostica -3,8 para el 2013, con lo que
se hacen ya seis los años de recesión sostenida.
Con el desempleo, que alcanzó en España el 27% y en Portugal el 30%,
el aumento intolerable de la criminalidad y la corrupción; la caída de
la producción, el comercio, la exportación y el turismo; las medidas
enticrisis, como el incremento de las cargas sociales, la disminución
de los servicios públicos, el aumento de los impuestos y otras, han
sido totalmente insuficientes, denunciadas por la ineficacia de las
soluciones, por el incumplimiento de las ofertas de estos gobiernos,
la ausencia de nuevas alternativas, a pesar de la alternancia del
poder; todo ello resume el rechazo del pueblo al conjunto del sistema
de poder a los partidos como intermediarios del pueblo ante el estado
y a toda la institucionalidad al servicio del sistema. La recesión
económica ha llegado a tal nivel que ha obligado a los países a
aceptar la supervisión internacional de sus programas de recuperación,
mediante la intervención de sus cuentas por la troika (Comisión
Europea, Fondo Monetario Internacional y Banco Central Europeo).
Todos los otros países, en distintas proporciones y con
características propias, padecen los mismos problemas causados por la
crisis. La gráfica Nº 1 muestra la disminución de la confianza
política en los partidos electos y sus respectivos presidentes en
Francia. A pesar de la alternacia política la tendencia se mantiene,
es decir que el conjunto poblacional no hace diferencia del matíz
político que los diferencia porque los resultados son los mismos. La
alternancia sólo refleja la esperanza de cambios que pueda beneficiar
al pueblo. El valor máximo al inicio de cada periodo muestra la
confianza depositada, la que luego es defraudada y al terminar el
periodo se busca una nueva perspectiva. Para el periodo de crisis del
sistema los valores son cada vez más alarmantes, con una proyección de
efectos impredescibles.
Graf. 1. Decrecimiento de la confianza de partidos y presidentes
gobernantes en Francia en función del tiempo. (Le Monde, 2013 10 15)
España y Grecia son apenas dos muestras del proceso que está
transitando el conjunto de países del mundo desarrollado del
capitalismo privado y mixto. La reacción popular no se ha hecho
esperar ante la insistencia de cargar sobre la clase media y baja los
efectos de la crisis. Se ha despertado una ebullición creciente de los
ánimos, exacerbados por el abuso del poder. Son los 15-M de España,
son los ocupas de EUNA, son los humanistas amazónico-platenses
sudamericanos, son los indignados del mundo. Es un torrente
incontenible de reclamos de las grandes mayorías, cuyo único destino
será el nacimiento de una nueva cultura, con ricos contenidos humanos
que satisfaga las múltiples y diversas inquietudes de la nueva
sociedad.
En los países del sistema del capitalismo socialestatal, existe un
nivel de descontento permanente, originado por el sectarismo
ideológico de la imposición del poder vertical, cuya muestra es la
necesidad de maniular contínuamente las elecciones periódicas a fin de
mantener el control del estado.
La crisis provoca un acelerado crecimiento de la presión social. Las
protestas sociales, hasta ahora han sido controladas haciendo uso
abusivo del poder. La gobernabilidad se hace a costa de la libertad
del pueblo, y no es que en el sistema liberal haya libertad, sólo que
su pérdida es más disimulada. La criminalidad, la delincuencia, el
crimen organizado son problemas que tornan los centros urbanos en
lugares inseguros. La corrupción institucionalizada, particularmente
de la justicia, la policía y las oficinas públicas son problemas de
permanente encrespamiento de las relaciones humanas. La prepotencia e
impunidad de los funcionarios generan cada día mayor injusticia y
rechazo de la población. El desabastecimiento, afecta gravemente la
economía familiar y nacional al dedicar el tiempo en la búsqueda del
alimento, imprescindible para la vida. El desencanto con el sistema
socialestatal se expresa en todo el conjunto, así en Sud América cada
vez asombran más las protestas de Venezuela, Brasil, Argentina,
Bolivia y Ecuador. No se puede dejar de mencionar la situación cada
vez más inestable de Rusia, Irán y China.
Todos los cambios que hasta ahora se han logrado sólo son cosméticos
para que el sistema capitalista sobreviva en su agonía. La caída del
imperialismo socialista apenas significó el traspaso de parte del
capital estatal al capital privado, fortaleciendo la alianza del
capital mixto. El surgimiento del socialismo del siglo 21 apenas ha
significado el traspaso de parte del capital privado al capital del
estado, también engrosando el capital mixto. La primavera árabe es
apenas un intento de democratización de las dictaduras que sostienen
el capital. En resumen, todo, sólo ha sido, hasta ahora, reajustes
internos, dentro del sistema de poder, sustento del capitalismo
mundial, para maximizar la eficiencia de la explotación de las
mayorías.
Sin embargo, es evidente que no existe en el marco capitalista ninguna
posibilidad de equilibrar el sistema en forma sostenible y
satisfactoria para la ciudadanía. La forma más grave de la crisis, ya
se mencionó, es la crisis de las macropolíticas, es decir la ausencia
de políticas que den solución a la crisis en el marco del capitalismo
y la democracia.
Todo mejoramiento tecnológico o científico aumenta la productividad,
agudizando el problema social; los nuevos niveles de equilibrio de
costo beneficio se hace con nuevos niveles de sacrificio social y el
sector social se encuentra ya al borde de una explosión incontenible,
cuyo torrente revolucionario impondrá los cambios que la sociedad
está exigiendo. El sistema de poder mundial ha entrado en una
contradicción insoluble con las demandas sociales.
Los escenarios que plantea la agudización de la crisis son: 1. El
sector del capital estatal, como sector hegemónico de poder, puede
ahogar al sector del capital privado del país en su beneficio, cuyo
escalofriante futuro son las premonitorias experiencias dictatoriales
del capital estatal. Conocimos las del sistema social-comunista, ya
fracasado, y sobreviven aún las dictaduras secantes de Cuba, Corea del
Norte y Eritrea, como patrones históricos de la imposición del poder
estatal.
- El sector del capital privado, como sector hegemónico de poder,
puede ahogar el capital estatal del país en su beneficio. En la
búsqueda de sistemas más humanos son paradigmáticos, en una primera línea de acción, la manipulación de los cambios hacia la democracia burguesa, como los llevados a cabo en Honduras y Paraguay. En una segunda línea de acción, la manipulación se encuentra en el pimponeo político entre derechas e izquierdas, como viene sucediendo en diversos países de Europa y América. En una tercera línea de acción aparecen las dictaduras de derecha como las de Banzer, Pinochet, Videla, etc.En una cuarta línea de acción, consolidado el sistema, busca legalizarse en la forma de las democracias burguesas. En una quinta línea de acción, se habrá retornado a la economía mixta socialestatal. Aquí se habrá retornado al primer escenario, agudizando la agresividad hasta llegar al extremo de despreciar a los
crímenes de lesa humanidad, como está sucediendo en la guerra civil de Siria, cuya consecuencia es impreviscible si se convierte en una guerra internacional. Con lo que se ha entrado a una espiral diabólica, cuyo desenlace final puede ser la destrucción de la humanidad o el rompimiento de la espiral mediante un cambio revolucionario, la eliminación del poder coercitivo, sostén de la estructura globalizada de explotación. - El tercer escenario es el cambio revolucionario con la consolidación de la sociedad humanista, sostenida por el humanismo superior, cuyos elementos básicos son la eliminación del poder coercitivo, la participación directa de las bases en la conformación de la estructura administrativa y de coordinación de los servicios y la producción y la apropiación de la riqueza en beneficio del pueblo.
La condición imprescindible para el rompimiento de la espiral
diabólica es la acción revolucionaria no violenta, resultado de la
maduración generalizada de la conciencia del pueblo, para sí, que está creciendo rápidamente con las enseñanzas nacidas de la lucha misma. Al mismo tiempo se consolida la organización requerida para adoptar las decisiones que ha de ser capaz de reemplazar el poder coercitivo por el no coercitivo y conformar una nueva estructura de administración y coordinación de los servicios y la producción.
Con estos requisitos fundamentales, la conciencia para sí, la
organización de las bases, la sustitución del poder coercitivo por el no coercitivo, y la nueva estructura administrativa y de coordinación, se habrán sentado las bases necesarias para la transferir el capital de las manos de las minorías explotadoras a las manos mayoritarias, sus verdaderos dueños, al que lo produce, como ser individual, e intermediado por la comunidad como ser social.
La entrega de los beneficios de la actividad productiva al sujeto,
significará la liberación del mismo de la esclavitud del trabajo para otros. Por fin, por primera vez en la historia de la humanidad, dejará de ser objeto del trabajo para convertirse en sujeto y dueño de su trabajo, será su creador, superará la animalización, la cosificación, que le impuso la civilización para ser por fin un ser humano, un ser creador en el nuevo estadio, el del humanismo superior.
El humanismo superior en la sociedad que muere. De los elementos que conformarán la nueva sociedad, algunos ya existen y otros empiezan a forjarse en la vieja sociedad, la que está en proceso de agotamiento, ésta es la del sistema de poder coercitivo mundial. Lo que nos permite avizorar la nueva perspectiva que se ofrece a la humanidad en el
estadio del humanismo superior y se resume como sigue.
La vida del ser humano. La identificación de los elementos ya
existentes en la sociedad que muere y que conformaran la nueva
sociedad se encuentran en el origen mismo del ser humano.
El humanismo, considerado ontológicamente, es la esencia del ser humano. Es la fuerza vital que lo acompaña y caracteriza desde su nacimiento. Por ello, su primera función es y siempre ha sido la preservación de la vida. Es la fuerza que garantiza la preservación de la especie, a pesar de la agresión del sistema de poder. Sin el humanismo la condición del ser humano no existe.
Humanismo primitivo. En su etapa primitiva estas relaciones se
establecieron en el círculo de la familia, luego en el de la tribu, el de la comunidad y en su entorno natural, mediante relaciones definidas dentro de lo que en otro trabajo hemos reconocido como el humanismo primitivo, lo que Carlos Marx identificó erróneamente como comunismo primitivo. . Ésta se hacía en base al regalo, la solidridad y amistad, en resumen fueron las relaciones de reciprocidad las que predominaron en esta etapa, expresión del derecho natural del ser.
Motivo por el que la identificamos como humanismo primitivo.
El bienestar. La sociedad expresa su esencia humanista en cada
esfuerzo realizados a lo largo de su existencia por alcanzar el mayor bienestar posible; es la fuerza impulsora, presente permanentemente en la voluntad de cambios de la sociedad por mejores condiciones de vida.
Fuerza de cambio. El humanismo, en el decurso de la era de la
civilización, es la fuerza generadora de los cambios de los modos productivos en búsqueda de nuevas condiciones de bienestar para las mayorías y en su nivel superior, con la ciencia y la tecnología, el humanismo superior encarna la confianza por un mundo de paz, libertad y amor. La historia de la civilización es la historia de las luchas del humanismo contra el poder, es la historia de las luchas del ser humano contra el ser animal, es la historia de las luchas del género humano por alcanzar un nivel superior.
La diversidad. Los esfuerzos de reivindicación de las aspiraciones del ser humano, sus ansias de libertad, sus luchas por mejores condiciones de vida, la defensa de las culturas, de los intereses regionales; los
pequeños detalles que hacen la vida, como el agua, la comida, la
vivienda, el transporte, constituyen la diversidad de conjuntos
naturales y sociales que conforman la sociedad, imposibles de ser atendidos por el centralismo vertical. Es indispensable estructurar la sociedad, que sea capáz de atender esta diversidad, asentada en una estructura horizontal, abierta y transparente, que mediante el diálogo
constructivo encuentre los consensos necesarios. Esta es la sociedad del humanismo superior.
Derechos humanos. El humanismo superior nace del derecho natural del ser humano, reconocido internacionalmente en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, por la Organización de las Naciones Unidos el 10 de diciembre de 1948, como garantía del mantenimiento de la paz y la seguridad internacional, afirmación del reconocimiento de la
dignidad intrínseca y del nacimiento de los derechos iguales de todas las personas como base de la libertad, la justicia y la paz en el mundo, y enriquecido por los aportes de la ciencia y la tecnología a lo largo de su devenir histórico.
De la conciencia en sí a la conciencia para sí. Los movimientos de masas, que van cubriendo cada día más al planeta, se caracterizan por la diversidad de las reivindicaciones exigidas, cuyas propuestas chocan con las políticas centralistas, los nacionalismos secantes, el estado homogenizador, los partidos sectarios, la democracia burguesa, la discriminación de las minorías. Sólo encontrarán respuesta en el humanismo superior, conformado en el diálogo de las bases, el
reconocimiento de su diversidad, el respeto al otro, la
complementariedad de los diferentes y el consenso.
La conformación de esta conciencia para sí está alimentada por 1. Las luchas de los pueblos, generadas por la crisis mundial, es el torrente
empírico más importante del despertar de la conciencia de los pueblos. - La democratización del conocimiento mediante la digitalización,
ensancha en forma vertiginosa la formación de la autoconciencia del pueblo. Por esta razón la lucha por el mantenimiento de la red mundial del intercambio del conocimiento en forma abierta, fuera de cualquier
control vertical, es una victoria del humanismo que se debe preservar.
Democracia de las bases. La democracia de las bases es la forma del ejercicio del poder de las bases. Es la instancia en la que el
individuo valida su existencia. A travez de la democracia de las
bases, en la que se ejerce el dialogo constructivo, no existen
soluciones de mayorías en desmedro de la minoría. El dialogo es una construcción colectiva del pensamiento, en el que todas las opiniones son atendidas, analisadas minusiosamente y se integran en un acuerdo consensuado. Es el proceso de intercambio simultáneo del ser individual con el ser social. Es el proceso en el que el ser se expresa integrando su carácter individual con su carácter social.
La creciente debilidad del poder posibilitará a las bases asumir la realización de sus reivindicaciones mediante la democracia de las bases, hasta ahora expresadas anárquicamente mediante los estados fallidos. La crisis es la partera del humanismo superior.
La organización de bases. Está en crecimiento acelerado. En la medida que la conciencia en sí va adquiriendo la forma de conciencia para sí, la organización de las bases crece. Es crucial el desarrollo del conocimiento, para madurar la conciencia y crear la organización encargada de impulsar el humanismo.
Las organizaciones de bases actualmente en lucha, en procura de la conciencia para si, son los movimientos que impulsan el humanismo: la organización de los nativos de Kandire y Tawantinsuyu, las protestas de los indignados y de los ocupa del mundo, la rebeldía de la primavera árabe, las comunidades autogestionarias de Méjico, las cooperativas mineras, el movimiento de los comerciantes, sindicatos
independientes, asociaciones, organizaciones comunitarias y cívicas apartidarias de Bolivia y el mundo.
La falta de claridad de sus luchas ha encumbrado partidos sectarios que desvian los fines del movimiento hacia la dependencia del capital socialdemócrata como en Egipto, Libia, Argelia y otros o hacia la dependencia del capital neoestatal como Venezuela, Bolivia, Ecuador, Siria y otros. Los nativos de valles y llanos de la cuenca amazónica-platense (Kandire) y de los Andes (Tawantinsuyu), aislados en el sectarismo de
partidos indianista, han cedido la mayoría del sector mestizo a la
dependencia del capital socialestatal de los gobiernos populistas,
llamados, del socialismo del siglo 21, impidiendo su desarrollo con la cosmovisión humanista de sus ancestros kandirenses y tawantisuyanos. Los indignados y los ocupa del mundo son movimientos de masas que no logran concretar los objetivos de sus luchas a causa de la
desarticulación en el diálogo constructivo, mostrándolos muchas veces como contradictorios entre sí. No han logrado reconocer el principio de la diversidad del movimiento y la importancia del consenso entre los diferentes para construir la sociedad diversa que el humanismo exige. La rebeldía de la primavera árabe, las comunidades autogestionarias de Méjico, las cooperativas mineras de Bolivia, los gremios de
comerciantes, sindicatos independientes, asociaciones, organizaciones comunitarias, cívicas, vecinales, apartidarias del mundo todo han quedado atrapadas en la dependencia del poder del estado, impidiendo
su evolución hasta lograr su independencia política.
Doble carácter del humanismo. La forma esencial de la existencia del ser humano, está constituída por dos componentes, el ser individual y el ser social, cuya manifestación depende de la situación concreta. Según ella, se manifestará como un ser individual o como un ser
social. Ambos están internalizados en el ser humano y se manifiestan acorde con el doble carácter de la materia, sugerido por De Broglie, en 1924, a partir de sus estudios sobre la mecánica cuántica.
La priorización del ser individual es el punto de partida del
liberalismo, idealizado, porque en forma pura jamás se ha logrado a pesar del control que siempre ha tenido. El poder que lo sostiene se ejerce a través de un estado fuerte, con lo que se desvirtúa el
individualismo.
La priorización del ser social es el punto de partida del socialismo, el comunismo y de todas las variantes de la izquierda marxista,
idealizado, porque en forma pura no existió jamás a pesar del control del poder que lo sustenta, ya que el individuo es el elemento
constitutivo fundamental de cualquier organismo social. Ésta depende del individuo y éste de la comunidad. En la pretensión de suprimir al individuo está el origen de su fracaso.
Ya hace más de siglo y medio la duración de la discusión ideológica y de lucha cruenta, de los dos sistemas centrales de poder de la
sociedad, el liberalismo y el socialismo, por imponer su respectivo sustento teórico, sin lograr el éxito deseado a causa de lo endeble de ambos planteamientos para una economía globalizada. A pesar de la crisis del sistema la lucha continúa y se agudiza peligrosamente.
El humanismo superior nace del reconocimiento de la existencia complementria del ser individual y el ser social en el ser humano. Es la conjunción de los seres individuales en la comunidad. El ser
individual expresa los intereses de la persona, mediatizados por los de la comunidad, lugar en el que se expresa el ser social, consensuado como el interés del conjunto comunitario.
El humanismo superior es el marco resolutorio acorde con la realidad de la confrontación, hasta hora excluyente por otra complementaria, del sistema de poder individualista y el sistema de poder estatal.
Condición objetiva para el humanismo superior. El modo globalizado de producción capitalista ha colocado una contradicción insoluble entre los grupos de poder, numéricamente pequeños y dueños del capital, y la inmensa mayoría del pueblo explotada. En la etapa de crisis, cada
elemento introducido en el sistema para mejorar la competitividad implica mayores desocupados, en general mayor sacrificio para la población. Esta contradicción exige el reconocimiento de un nuevo modo productivo, que incorpore en él la diversidad de intereses de la inmensa mayoria poblacional, que transforme esta mayoría, mejor dicho,
a toda la población en propietaria de la riqueza y cada individuo se beneficie de la distribución equitativa de la misma.
La ideología marxista propone, engañosamente, entregar la propiedad de toda actividad productiva a los trabajadores. Para ello establece al estado como organización encargada de la producción a nombre del pueblo, la clase trabajadora como vanguardia social y el partido comunista como consciencia de la clase trabajadora.
Lo primero que se debe aclarar es, que la transferencia del capital productivo al estado no cambia la esencia capitalista del sistema, sólo se habría cambiado de explotador, el estado por el propietario privado. El trabajador sigue entregando su plusvalía al nuevo patrón, ahora personificado en el estado. El estado no tiene los intereses del trabajador, motivo por el que se transforma en un nuevo explotador del trabajador y el pueblo todo. Finalmente el partido comunista se arroga la representación de los trabajadores y a nombre de ellos el gobierno se transforma en una dictadura de una minoría partidaria. Junto con la dirigencia sindical se establece una alianza partidaria-obrera, componentes de la nueva clase de ricos del sistema socialista. Ejemplo de este sistema fue el imperio socialista de la URSS, que ya ha fracasado, y la China
comunista transformada en capitalismo mixto. En la actualidad, el socialismo del siglo 21, como método de acceso al poder, se declara democrático, pero la hegemonía clasista y unipartidaria del sistema lo transforma en un remedo aprimorado con democracia. En el fondo es otra dictadura de estado.
Para evitar todo engaño, de cualquier intermediario, el humanismo superior propone la entrega de la propiedad de la actividad productiva al mismo pueblo. El estado deja de serlo y se transforma en una entidad administrativa, de coordinación producción y servicio
dependiente del control directo de las bases, institucionalizadas por las organizaciones comunitarias del pueblo, expresión del poder no coercitivo de las bases. Cada miembro de la comunidad será el propietario de las actividades productivas, con lo que se transforma en directo beneficiario de las utilidades generadas por el trabajo,
las que serán distribuídas equitativamente, por la comunidad, en forma acorde al aporte en la generación de la riqueza.
Además la introducción del nuevo sistema productivo, asentado en la búsqueda nuevos valores humanos, en el poder no coercitivo de las bases, en la gestión desde abajo liberará los inmensos recursos que se despilfarran en la economía de consumo, en la burocracia y en el sostenimiento de las fuerzas armadas, necesarios para atender las necesidades de dos mil millones de pobres que tiene la humanidad.
Hermana Naturaleza. Una parte esencial del ser humano es la naturaleza a la que pertenece, es parte inseparable de la naturaleza, sin la naturaleza el ser humano no existiría. Esta integración existencial con la naturaleza está en su orígen y su complementación constituye un objetivo central del humanismo superior. No supedita la naturaleza al ser humano, ni el ser humano a la naturaleza, es indispensable la preservación simultánea de ambos mediante una interrelación de
equilibrio horizontal.
La economía de mercado ha introducido desajustes ecológicos y
ambientales que amenazan seriamente la vida de la fauna, la flora y con ello de la vida humana, por lo que se debe corregir en forma perentoria el uso indiscriminado de la naturaleza.
La cosmovisión kandirense dejó gravado en piedra, que el ser humano debe cuidar a la naturaleza como a una hermana muy delicada, que depende de él y, a su vez, ella le da protección No se confude con La Madre Tierra, cuya relación con el ser humano es vertical, ésta es símbolo de la sociedad del poder, de sometimiento servil del ser
humano a la tierra, que el humanismo rechaza. El concepto de
naturaleza es totalizador, el de tierra es restrictivo.
La eliminación de la violencia. El proceso de transición pacífica de un sistema de poder vertical, coercitivo, a otro, de gestación desde las bases, no coercitivo, es uno de los componentes fundamentales del humanismo. Sólo la participación activa de las bases logrará este
cambio revolucionario.
En primer lugar, con el uso de la violencia el poder introduce sus deformaciones intrínsecas en la nueva sociedad, es decir transforma el movimiento triunfante en otro instrumento de sometimiento, como todos los que hasta ahora han existido. En segundo lugar, es indispensable que esta revolución tenga un carácter pacífico para evitar prolongar la sobrevivencia del poder establecido, la revolución violenta es
parte del juego del poder coercitivo y cualquier alternativa de poder vertical prolongará el sistema. En este punto crítico, ante su desaparición inminente, la fuerza acumulada en su larga existencia, asumirá todos los riesgos para evitarla y abre la posibilidad de una salida catastrófica, que se debe impedir. En tercer lugar la
revolución pacífica garantiza el reconocimiento y desarrollo de los nuevos valores y principios en los que se fundamentará la sociedad del humanismo superior.
El poder, cuando es rebasado por las masas, se reconstituye en el interior de ellas para transformarse en el sostén de la dirigencia del nuevo movimiento victorioso, los nuevos dueños de las riquezas. Al mismo tiempo, degradan las reivindicaciones y abandonan las mayorías
que las impulsaron. Así por ejemplo, la revolución francesa realizada por las masas populares contra el poder conservador del absolutismo monárquico, con el nuevo poder revolucionario consolidó a la burguesía, convertida en la pequeña minoría de nuevos ricos, dueños del capital, expropiadores de la riqueza del pueblo que los encumbró. La revolución socialista y comunista hecha con el sacrificio abnegado de campesinos, clase media y obreros, contra el poder del zarismo, encumbró en el nuevo poder revolucionario a la burocracia del partido
comunista, pequeña minoría beneficiaria de la riqueza de la nación, la nueva clase dominante, los nuevos ricos, que mantuvo explotado al pueblo, el verdadero dueño de la revolución. El movimiento humanista que surge desde el fondo de los valles y la selva de la cuenca
amazónico-platense de Bolivia (Kandire) como reivindicación de nativos, campesinos, sectores medios y obreros, fue deformada por las veleidades imperiales y racistas del fanatismo aimara de su presidente, Evo Morales, nuevo engendro dictatorial surgido de las entrañas mismas del movimiento. Usa inconstitucionalmente el poder, entre otros, para hacerse nombrar presidente para un tercer periodo, con proyección vitalicia, y para asegurar el fortalecimiento del crimen organizado (narcotráfico, contrabando, corrupción y otros).
Estas transformaciones estuvieron en los marcos de la contradicción de las condiciones objetivas del desarrollo de las fuerzas productivas y de las relaciones de producción, sustentadas por el poder acumulado con la apropiación capitalista del excedente del trabajo.
La fuerza explosiva de las necesidades generadas por la acumulación global de las riquezas ha originado la aparición de nuevas contradicciones insolubles entre la heterogenea masa del pueblo y los dueños de la economía globalizada, cuya lucha viene logrando importantes recomposiciones en la cúpula del poder a lo largo del siglo pasado y el que se inicia.
Las pretensiones de supremacía mundial de Alemania, apoyada en las potencias aliadas de Italia y Japón conocida como Alianza del Eje Berlín, Roma y Tokio fracasó totalmente el 1945, de cuyo resultado nacieron dos nuevos aspirantes a la supremacía mundial: El capitalismo privado, hegemonizado por EUNA y el capitalismo estatal, hegemonizado por la URSS.
El fortalecimiento del sistema imperial socialista obligó al sistema imperial del capital privado a reconocer en su espacio a un sector cada vez más importante de capital mixto, es decir la convivencia del capital privado con el capital estatal a condición de mantener la hegemonía del capital privado en la forma de la socialdemocracia.
La competencia de los dos sistemas imperiales y las debilidades
internas del sistema estatal llevó al colapso de éste y lo obligó a
transformarse en un sistema de capital mixto con el reconocimiento en
su espacio de un sector del capital privado a condición de mantener la
hegemonía del capital estatal, identificado como capitalismo neoestal
o socialestatal.
A consecuencia del desarrollo de la guerra civil en Siria, de cerca de
tres años de duración, las aspiraciones de hegemonía mundial del
imperialismo neoliberal han sido frenadas por la alianza fáctica del
sistema neoestatal y las fuerzas emergentes populares e islamistas.
La inminencia de una guerra internacional a causa de los crímenes de
lesa humanidad cometidos en Siria y la debilidad creciente de los
imperios hegemónicos, ha logrado el relajamiento de la tensión
internacional mediante los acuerdos encabezados por Rusia y EUNA. En
el fondo es una recomposición de fuerzas, un acercamiento entre el
sistema de capital mixto socialdemócrata y el socialestatal para
enfrentar el crecimiento de las fuerzas populares e islamistas, que
amenazan su desplazamiento.
A la desaparición del sistema del capital estatal, con el colapso de
la URSS, ahora se suma la secundarización del sistema hegemónico del
capital privado con lo que ya se puede afirmar que la expresion del
imperio del capital estatal ha desaparecido y el imperio del capital
privado está en proceso de desaparición, consolidando el capital
mixto, en una alianza de las dos variantes y, en la medida que se
debilitan los poderes fundamentalistas, privado y estatal, se abren
espacios de diálogo y de búsqueda de soluciones pacíficas.
El poder directo de las bases es la garantia de la sociedad humanista.
Cuando el ser humano logra la producción de excedentes con la agricultura y la ganadería, en el neolítico, es cuando la sociedad se diferencia entre explotadores y explotados y se impone la existencia de un órgano opresor. Así se impone el poder y con él todos los instrumentos que lo complementan.
En el largo periodo de la civilización, el poder como sustento de los explotadores, ha sido la fuerza conservadora de la sociedad, la que se ha opuesto a los cambios y a los movimientos reivindicativos.
En el pasado los cambios revolucionarios, que reemplazaron los modos productivos agotados, no aseguraron los resultados en beneficio de las mayorías.
Si el nuevo sistema se fundamenta en la participación activa de las bases, las que constituyen el conjunto de la población, se asienta en el diálogo constructivo, la transparencia, en el respeto y la complementariedad de los diferentes se estará frente a un sistema que
ha reemplazado el poder coercitivo por el no coercitivo para su funcionamiento, se estará sentando las bases de una nueva cultura de contenido humanista, el poder directo de las bases como garantía de la nueva sociedad.
La humanización del ser. Los beneficios del trabajo, expropiados por el amo, por el señor o por el patrón del estadio de la civilización animalizaron al ser humano, transformándolo en esclavo, siervo u obrero, un ser alienado y sin capacidad creativa.
Con el humanismo superior el trabajador por fin logrará su liberación al transformase en dueño de los beneficios de su trabajo, pasará a la condición de sujeto creativo y recuperará la condición humana perdida con la civilización.
Con el humanismo superior se abrirá el potencial del desarrollo humano a su maxima capacidad, florecerá la riqueza de su diversidad y su
espiritualidad alcanzará niveles insospechados.
La humanización del ser, en el fondo, se trata de una nueva sociedad que superará las ilusiones de la riqueza para todos, para reemplazarla por el sueño, hecho realidad, de la felicidad para todos.
Las frescas brisas de esperanza que empiezan a dar vida nueva a la humanidad, presagian el salto cualitativo más grande en el devenir del género humano, se logra por fín el viejo sueño de la transformación del ser animal, impuesto por el poder a lo largo de la civilización en
el ser humano que augura el humanismo superior.
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2 respuestas a «Estados fallidos: transición al Humanismo Superior»
☆ ¿QUÉ ES EL TIEMPO-ESPACIO? ☆
👁 🔥 👁
~ POR: ALEJANDRO MARTINEZ GALLARDO ~
EL ENTRELAZAMIENTO CUÁNTICO, CON SUS EXTRAÑAS CONEXIONES INSTANTÁNEAS A DISTANCIA, PARECE SER EL TEJIDO MISMO DEL TIEMPO-ESPACIO. LAS IMPLICACIONES SON ASOMBROSAS Y ABRUMADORAS.
Las partículas subatómicas exhiben una propiedad que ha llegado a definir en gran medida la noción popular de que el mundo cuántico es sumamente extraño y misterioso. Se trata del entrelazamiento cuántico o la conexión instantánea entre dos partículas (o sistemas cuánticos) que permite que la medición de una partícula determine el estado de otra no obstante la distancia a la que estén. Así, una partícula en la Tierra puede afectar en este mismo momento a otra partícula que se encuentra en las Pléyades, como si fueran una misma unidad. Esto es algo tan extraño para la física clásica –ya que en apariencia contradice las leyes de la naturaleza, específicamente el límite de la velocidad de la luz– que Einstein lo calificó como una fantasmagórica o espantosa propiedad («spooky action at a distance») que debería de ser ficticia. Recientemente, sin embargo, físicos han descubierto que el entrelazamiento cuántico no sólo es real sino que podría ser responsable de la geometría del tiempo-espacio. Paradójicamente fue Einstein quien tuvo la visión de concebir el tiempo-espacio como un continuum esencialmente geométrico.
Una de las grandes innovaciones de Einstein fue su conclusión de que la gravedad es una propiedad de la geometría del tiempo-espacio. En la teoría de Einstein, la interacción entre la materia y la energía y el tiempo-espacio forma una distorsión de la geometría fundamental del tiempo-espacio, esto es la famosa curvatura que tanta especulación ha generado sobre posibles viajes de un extremo a otro del universo. Es a esta distorsión a lo que nos referimos cuando hablamos de la gravedad, una propiedad emergente y relativa. Es decir, la gravedad es geometría, siendo ésta última el constituyente fundamental de la cosmología de Einstein.
El gran reto de la física contemporánea es la conciliación de la gravedad con la mecánica cuántica. Uno de los físicos jóvenes que más se han acercado a finalmente encontrar el hilo dorado de la conexión entre estos dos modelos es Mark Van Raamsdonk, quien ha elaborado una teoría bastante plausible que sugiere que el entrelazamiento cuántico es la base de la geometría del universo y por lo tanto de la gravedad. «El espacio-tiempo es sólo una imagen geométrica de cómo un sistema cuántico se entrelaza», dice Van Raamsdonk.
👁 EL PRINCIPIO HOLOGRÁFICO 👁
Van Raamsdonk ha elaborado sobre el principio holográfico del físico argentino Juan Maldacena, el cual sostiene que el universo 3D en el que creemos vivir es el desdoblamiento de un universo en 2D que contiene codificada la información que se despliega como la realidad que experimentamos, de la misma forma que una película holográfica en 2D despliega una imagen en 3D. La teoría, que se conoce también como dualidad de Maldacena, propone que existen dos modelos diferentes del universo. Uno conocido como frontera («boundary») el cual se concibe como una superficie en 2D, se define matemáticamente, está libre de gravedad y a una distancia infinita de cualquier punto del otro universo. Este otro universo es conocido como bulto («bulk»), tiene tres dimensiones y está delimitado por el primero de la misma forma que el aire tridimensional esta encerrado por la superficie bidimensional de un globo. Según explica el editor de la revista Nature, las partículas de este universo voluminoso obedecen a las ecuaciones de los sistemas cuánticos del universo frontera.
Maldacena hizo que se popularizara la idea de que el universo podría ser un holograma luego de que descubrió que estos dos universos son completamente correspondientes; de la misma manera que el circuito de un chip codifica en 2D las imágenes en 3D de un juego de computadora, la información del universo frontera contiene la información exacta y los principios físicos que rigen el universo bulto en 3D. De tal manera que se ha especulado que nuestro universo podría ser una especie de proyección holográfica que se genera en la superficie de un agujero negro.
🔮 EL PEGAMENTO GEOMÉTRICO DEL COSMOS 🔮
En lo que se considera un avance posiblemente revolucionario, Van Raamsdonk pudo remover el entrelazamiento que unía a estos dos universos modelo usando una herramienta matemática. El físico observó que cuando se quita este pegamento cósmico en este modelo el tiempo-espacio se empieza a alargar hasta que se fragmenta en pedazos inconexos, «como cuando se estira un chicle demasiado», todo queda atomizado. Ahora bien, esto es un problema porque la definición misma de tiempo-espacio es la de una unidad continua. Podríamos definir el tiempo-espacio como «la unión de todos los eventos de la misma forma que una línea es la unión de todos los puntos». En otras palabras, sin el entrelazamiento cuántico el universo simplemente no es un universo. «El entrelazamiento es el ingrediente esencial que teje íntimamente el tiempo-espacio en un todo –y no sólo en el caso de los agujeros negros, sino siempre», señala Ron Cowen en Nature. «El entrelazamiento es el tejido del universo», dice Brian Swingle de la Universidad de Stanford, «es el hilo que une todos los sistemas en uno». El físico John Preskill explica que el entrelazamiento es lo que permite que «podamos aprender algo de una parte observando otra», hablando en términos físicos de una especie de sistema de correspondencias o analogías en el corazón de la materia. Juan Maldacena piensa que el entrelazamiento cuántico es responsable de la «bella continuidad del espacio-tiempo. En otras palabras, la estructura sólida y confiable del tiempo-espacio se debe a las propiedades fantasmagóricas del entrelazamiento».
El trabajo de Van Raamsdonk, sumado al de Maldacena y otros físicos, parece haber encontrado el «pegamento geométrico» del cosmos, del cual es posible derivar un modelo del entrelazamiento cuántico en el que no se ponga en entredicho la ley que impide que algo viaje más rápido que la velocidad de la luz. Las partículas conectadas por el entrelazamiento, se sugiere, forman un agujero de gusano, una especie de túnel que las conecta a la distancia. El entrelazamiento y el agujero de gusano (wormhole), explica Maldacena, son sinónimos. Pero este agujero de gusano no es precisamente un túnel como lo imaginamos normalmente sino que se trata de una especie de atajo o pasadizo que conecta inmediatamente dos puntos en el universo. Según Maldacena el entrelazamiento cuántico genera una «conexión geométrica» que conecta las partículas pese a que «no existe interacción directa entre los dos sistemas». Los agujeros de gusano son entonces definidos geométricamente y no topológicamente. En otras palabras, los agujeros de gusano serían en sí mismos información cuántica entrelazada, y no una estructura espacial como tal. El entrelazamiento cuántico parece obligar a que el universo sea no local, los objetos no separables y las diferentes regiones del espacio no independientes. El entrelazamiento cuántico, si tal cosa es concebible, va más allá del tiempo-espacio; es, según Van Raamsdonk, lo que lo crea.
Para entender esto nos puede ayudar la forma en la que Maldacena explica la interacción entre partículas adentro y afuera de un agujero negro. La física mantiene que la información no se destruye, lo cual es un problema en el caso de los agujeros negros, de los cuales, según el modelo viejo, nada puede escapar. Para que la información no se pierda, Maldacena dice que las partículas dentro del agujero negro deben de estar conectadas con las partículas que lo dejaron tiempo atrás (emitidas por la llamada nube de Hawking): las partículas adentro y las partículas afueran son consideradas como la misma partícula. Un complejo agujero de gusano en forma de pulpo vincularía las partículas. Esta es la paradoja central: existe un vínculo y sin embargo las partículas para toda consideración práctica son una y la misma. Esta es la zona prototípica de la llamada quantum weirdness, en la que nos encontramos con una especie de koan cósmico que desafía la lógica ordinaria.
🌐 COMPUTACIÓN CUÁNTICA HOLOGRÁFICA 🌐
Bajo esta lógica no aristotélica, consideremos el caso de las computadoras cuánticas que teóricamente podrían procesar una cantidad infinitamente superior de información de la que actualmente procesan nuestras computadoras más avanzadas. Las computadoras cuánticas funcionarían a través del entrelazamiento, computando en estado de superposición, simultáneamente ceros y unos, no en bits sino en q-bits. Los q-bits, como pixeles holográficos, estarían almacenados de manera no local, no en un punto específico sino distribuidos en una región amplia del espacio. Van Raamsdonk equipara nuestro universo con una computadora cuántica: «Un chip metafórico almacenando toda la programación del universo debe almacenar la información como una computadora cuántica». En su modelo los q-bits deben de estar conectados a través del entrelazamiento cuántico de una manera todo-abarcante. «Para tener el tiempo-espacio clásico debes entrelazar todas las partes de tu chip de memoria», señala Van Raamsdonk. Emerge entonces que el espacio es el trenzado de todos los microestados cuánticos –y este trenzar, esta madeja holográfica es la geometría misma del cosmos de la cual emergen propiedades como la gravedad.
Sin esconder su entusiasmo, Mark Van Raamsdonk externa su epifanía: «Creí entender entonces qué es el tiempo-espacio». La gran aportación de Einstein fue demostrar que el espacio y el tiempo eran una unidad fluida, un continuum, que tenían una inextricable relación. La física actual parece llegar a un nivel aún más profundo en esa relatividad tiempo-espacial, mostrando que el entrelazamiento es un concepto aún más profundo y esencial que el tiempo y el espacio mismo. Van Raamsdonk sugiere que el universo es esencialmente entrelazamiento cuántico, pero, ¿cómo podemos entender este entrelazamiento cuántico en un sentido filosófico, ya que indudablemente estamos cruzando al terreno de la filosofía?
🌌 LA FILOSOFÍA DEL TIEMPO-ESPACIO 🌌
Evidentemente creer tener una respuesta concluyente a esto sería demasiado pretencioso. Sin embargo, podemos hacer nuevas preguntas y considerar la cuestión desde distintos ángulos. Para esto, primero revisemos brevemente lo que conocemos sobre el entrelazamiento cuántico. Sabemos que dos partículas están entrelazadas cuando, al realizar la medición de una partícula, la otra partícula instantáneamente será localizada donde los principios de la conservación de energía, momentum, movimiento angular y spin determinan que esté. Antes de esto no podemos determinar su localización (es no local), y es sólo después de la medición que podemos decir que las partículas están separadas. Es por esto que cuando se habla de no localidad se asume también una inseparabilidad.
Según los físicos Nicolas Gisin y Antoine Suarez, esto significa que «algo está viniendo de fuera del tiempo y el espacio». Marvin Chester escribe en su libro Primer of Quantum Mechanics: «Antes de la medición no hay par de partículas; sólo existe un átomo gigantesco. Este átomo permea todo el espacio. El experimento desmaterializa el átomo, y en su lugar dos partículas aparecen. Cada uno se materializa, como deben de hacerlo en el universo, para preservar las leyes de la naturaleza».
Esto parece decirnos que el universo en su estado de inconmensurabilidad es un solo átomo, indivisible como la mónada pitagórica. (¿Cómo explicar el entrelazamiento cuántico si no es través de la unidad, más allá de la apariencia de separación?). Es en el acto de medición en el que se separa y se revela como una multiplicidad sujeta al tiempo y al espacio. Existe un factor en la ecuación que quizás Maldacena y Van Raamsdoonk no han considerado: la conciencia. La conciencia sigue siendo uno de los misterios de la ciencia moderna, pero algunos físicos teorizan que podría ser una propiedad tan fundamental como el tiempo-espacio y no una condición emergente. Según Roger Penrose y Stuart Hameroff, la conciencia es algo más que sólo computación, es un «proceso cuántico intrínseco al universo» que está conectado a la estructura del universo en su escala más básica: la geometría del tiempo-espacio. Así llegamos a una extraña red de identidad analógica: tiempo-espacio, geometría, entrelazamiento cuántico y conciencia, ¿acaso distintos términos para describir una misma (y única) cosa? El mismo Hameroff reconoce que esto tiene implicaciones espirituales.
El cabalista Aryeh Kaplan, en su traducción del Sefer Yetzirah, habla de que la visión cabalista concibe el universo como una tríada: tiempo-espacio-espíritu, un continuum (donde podríamos intercambiar conciencia y espíritu). Los textos cabalistas indican que todas las cosas son una sola: la emanación del Ein Sof, la unidad absoluta e incomensurable, lo infinito, el no lugar donde las leyes de la física se anulan y sugieren que solamente percibimos las cosas separadas, distantes entre sí y fragmentarias por un hábito erróneo de percepción –es nuestra cognición, nuestra medición la que separa las cosas y las representa como sujetos y objetos, como diferentes partículas. En el estado no verbal, de la no medición, la realidad, el cosmos entero es una sola cosa –es sólo cuando lo describimos que se multiplica. El físico David Bohm habla de una totalidad implicada de la cual emergen las partículas y los fenómenos que observamos dualísticamente; la totalidad implicada de Bohm, a la cual se refiere como un mar de conciencia y de infinita potencialidad, parece ser algo similar al Ein Sof y al mismo sunyata del budismo, la vacuidad radiante.
Alain Daniélou, el musicólogo francés y erudito del jainismo, explica que en la cosmovisión de los Puranas (los textos que reúnen las leyendas de los dioses hindúes) existe una trinidad fundamental: la conciencia, el espacio y el tiempo. Tres aspectos de una única realidad. No difiere demasiado de la idea hindú que considera que la creación es un único pensamiento -o un sueño- que ocurre dentro de la conciencia de un ser universal.
Esta trinidad de interdependencia conciencia-tiempo-espacio también fue advertida por Jung. En su libro sobre la sincronicidad, el psicólogo suizo escribe:
Los experimentos Rhine han demostrado que en relación a la psique el tiempo y el espacio son, por así decirlo, “elásticos” y pueden aparentemente reducirse al punto de la desaparición, como si fueran dependientes de condiciones psíquicas y no existieran por sí mismos sino que fueran “postulados” por la mente consciente. En la visión original del mundo, como la encontramos entre hombres primitivos, el tiempo y el espacio tienen una existencia precaria. Se convierten en conceptos “fijos” sólo en el curso del desarrollo mental, gracias sobre todo a la introducción de la medición. En sí mismos, el espacio y el tiempo consisten en nada. Son conceptos hipostasiados engendrados de la actividad discriminatoria de la mente consciente, y forman coordenadas indispensables para describir el comportamiento de los cuerpos en movimiento. Son, entonces, esencialmente psíquicos de origen.
El último aspecto con el que quiero «entrelazar» a la física con la filosofía (siguiendo la vieja idea de que la metafísica de hoy (o ayer) es la física de mañana) es esta idea de la interdependencia. Si el entrelazamiento cuántico permea en su aspecto más básico el espacio, de tal forma que éste puede concebirse como un tejido cuántico de partículas entrelazadas (una vez que una partícula entra en contacto con otra forman un sistema y permanecen entrelazadas teóricamente para siempre) y de regiones espaciales que no pueden considerarse independientemente (y siguiendo la sincronicidad de Jung, también de momentos de tiempo entrelazados), entonces podemos decir que todas las cosas están intrínsecamente conectadas y que dependen unas de otras. Esto es casi exactamente lo que viene diciendo desde hace cerca de 2 mil años el budismo mahayana. De la misma forma en que para la física moderna el entrelazamiento cuántico es equivalente al tiempo-espacio, para el gran filósofo budista Nagarjuna, la interdependencia de todos los fenómenos y todas las cosas es equivalente al vacío. Las cosas están vacías, porque carecen de una existencia inherente e independiente, no tienen una naturaleza propia, individual o separada, están embebidas en el tejido mismo del universo, de la misma forma que una ola no tiene una existencia independiente del océano (¿y una partícula de la espuma cuántica?). Jay Garfield, traductor del Mulamadhyamakakarika, el texto esencial de Nagarjuna, pone el ejemplo de una mesa (y por qué está vacía):
Su existencia como objeto, eso es, como mesa, no sólo depende sí misma o de cualquier característica no relacional, sino también en nosotros. Eso es, si este tipo de mueble no hubiera evolucionado en nuestra cultura, lo que nos parece ser un objeto obviamente unitario en cambio sería descrito correctamente como cinco objetos: cuatros palos bastante útiles absurdamente montados sobre una tabla de madera esperando a ser labrada. Esto es para decir también que la mesa depende para existir de sus partes, de sus causas, de su material, y así sucesivamente. Aparte de éstos, no hay mesa. La mesa, podemos decir, es una tira de tiempo-espacio puramente arbitraria elegida por nosotros como el referente de un nombre único, y no una entidad demandando, por su propia cuenta, reconocimiento y análisis filosófico para revelar su esencia.
Como la mesa, dice Nagarjuna, todos los fenómenos están vacíos y no tienen existencia real independiente. Incluyendo el vacío mismo. Y quizás no se equivocaba el gran maestro budista, puesto que al parecer el tiempo-espacio es en el nivel más básico que podemos conocer una serie de partes vinculadas a otras partes y así hasta el infinito. Todas las cosas, nosotros mismos, estamos hechos de este entrelazamiento, de esta concatenación, de esta pratītyasamutpāda (originación dependiente), de esta cadena de reflejos insustanciales que emergen y regresan siempre al vacío y que por lo tanto no se puede decir que tienen una esencia diferente a ese vacío. Las implicaciones son realmente abrumadoras.
Vimos en una sociedad de opinión, y no de conocimiento. La diferencia es muy importante, realmente decisiva.